El Ayuntamiento de Conil, a través de su Delegación de Medio Ambiente y Patrimonio Natural, ha lanzado un llamamiento a la ciudadanía para que se respete el entorno dunar de la playa de Castilnovo, coincidiendo con el inicio de la temporada de nidificación del chorlitejo patinegro, una especie protegida y en peligro.
La advertencia llega tras la comunicación del colectivo Agaden Ecologistas / Salvemos al Chorlitejo Patinegro, que ha confirmado que ya podrían estar presentes los primeros nidos de este ave costera en la zona. Por ello, se recuerda que está terminantemente prohibido acceder a las dunas, una medida esencial para garantizar la supervivencia de esta especie.
Las autoridades locales insisten en la importancia de cumplir con la normativa ambiental vigente, así como con las ordenanzas municipales que regulan el uso del litoral. El incumplimiento de estas medidas puede conllevar sanciones administrativas, ya que se trata de un espacio natural especialmente sensible y protegido.
El chorlitejo patinegro, característico de playas arenosas y sistemas dunares, enfrenta cada año amenazas derivadas de la presencia humana, especialmente durante su época de reproducción. La invasión de su hábitat natural puede provocar la destrucción de nidos o la perturbación directa de las crías.

Por este motivo, desde el Ayuntamiento de Conil se hace un llamamiento a la responsabilidad individual y colectiva para evitar acceder a las áreas señalizadas, permitiendo así el desarrollo adecuado del ciclo reproductivo de esta especie clave para el equilibrio ecológico del litoral.
Además de las labores de vigilancia y conservación, se promueve también la participación ciudadana. Las personas interesadas en colaborar con el proyecto, ya sea como voluntarias o a través de actividades de observación educativa con menores, pueden contactar directamente con el colectivo ecologista que impulsa esta iniciativa.
Labor divulgativa
Agaden y Salvemos al Chorlitejo Patinegro desarrollan una intensa labor divulgativa en torno a esta ave costera, con acciones centradas en la concienciación ambiental, la educación en valores naturales y el seguimiento científico de la población de chorlitejos en el entorno de Castilnovo.
Estas medidas se enmarcan dentro del compromiso municipal con la protección del patrimonio natural del término conileño, especialmente en un contexto en el que muchas especies vulnerables se ven afectadas por el impacto del turismo y la actividad humana descontrolada.
La playa de Castilnovo, uno de los espacios más emblemáticos del litoral de Conil, se convierte así en escenario de un esfuerzo conjunto entre instituciones, asociaciones ecologistas y ciudadanía para preservar la biodiversidad y garantizar la convivencia sostenible entre el ser humano y el entorno natural.