Ocho trabajadores del sector del metal serán juzgados este martes 12 de marzo por desórdenes públicos y atentado a la autoridad. Sus colegas y vecinos afirman que no estarán solos en este proceso.
La Coordinadora de Trabajadores del Metal (CTM) aseguraba en la víspera, este lunes, que estarán arropados por numerosos colectivos, "como asociaciones de vecinos", familiares, amigos, compañeros en huelga de la planta de Acerinox en Algeciras, representantes sindicales y hasta personajes púbicos.
Los ocho del Río San Pedro, todos son vecinos de la barriada puertorrealeña, afrontan cargos por los disturbios registrados en esas calles el 22 de noviembre de 2021, en uno de los episodios de mayor tensión en la huelga "legal" del sector.
Los acusados podrían ser condenado a penas de tres años de cárcel cada uno en el peor de los supuestos
Fueron casi dos semanas de protestas en reivindicación de mejoras y cumplimiento en el convenio colectivo, así como de carga de trabajo para los astilleros de la Bahía de Cádiz y, por tanto, para las empresas auxiliares o subcontratas en las que trabajan.
En esos días, y especialmente en el Río San Pedro el 22 de noviembre, día de los hechos que se juzgan, las fuerzas de seguridad utilizaron la recordada "tanqueta" para reprimir las movilizaciones.
Además, los agentes antidisturbios hicieron uso de gases lacrimógenos y pelotas de goma. "Los imputados son ocho, pero deberían imputarnos a todos porque todos somos culpables de salir en defensa de nuestros derechos, que cada vez están más pisoteados".
"La precariedad afecta a todos los niveles de subcontratación. Salimos a la calle en aquel momento no sólo por el poder adquisitivo, que también, salimos por dignidad, por el derecho a vacaciones, a una liquidación por despido, a que se cumplan nuestros convenios" recuerda el portavoz, Jesús Galván.
Los representantes de la CTM, reunidos ante el colegio Viento del Sur del Río San Pedro, aseguran que el convenio y las mejoras "a día de hoy siguen sin cumplirse". Aseguran que los juzgados este martes, en las salas del estadio Nuevo Mirandilla, no sólo representan al sector del metal porque "salió la población en general".
Los trabajadores juzgados este martes se enfrentan a posibles penas de dos años de cárcel por desórdenes públicos y un año por atentado a la autoridad. Un asesor legal de la CTM, adscrito a la Cooperativa Gestea que les representa, aseguraba en esta comparecencia previa que "la Fiscalía ha optado por el camino más duro. En vez de juzgar los hechos con la Ley de Seguridad Ciudadana ha optado por otros artículos que implican mayores condenas, los que persiguen los disturbios en el caso de uso de armas y organización previa".
"Algunos compañeros iban con sus hijos de la mano y les tiraron al suelo, les esposaron, como si fueran terroristas"
Los compañeros de los acusados dicen sentirse maltratados: "Algunos de los acusados iban con sus hijos de la mano y les tiraron al suelo, le esposaron, como si fueran terroristas".
Galván hace memoria de aquel 22 de noviembre de 2021 y afirma que "la Policía acudió al Río San Pedro creyendo que íbamos a cortar la carretera, cosa que nunca hicimos. Y, claro, empezaron unas cargas policiales desproporcionadas. La gente de la barriada se llevó las manos a la cabeza. Nos metieron hasta una tanqueta aquí en un barrio obrero".
Los representantes de los ocho vecinos juzgados este martes afirman que el despliegue policial puso en peligro muchos residentes en la barriada: "Les dio igual que fuera hora lectiva, de guardería y colegio, que hubiera vecinos comprando el pan y personas mayores haciendo su vida diaria. Se dieron unas medidas desproporcionadas. Había 12 furgones de Policía, ¿a qué venía ese despliegue? Fue algo brutal".
"Van a levantar otra vez el conflicto. No olvidemos que a día de hoy se está negociando el convenio colectivo"
Jesús Galván, en nombre de la CTM, asegura que la presunta represión que denuncian puede ser contraproducente: "Quieren apagar el fuego y así no lo van a conseguir. Así van a levantarlo. Somos organizaciones dispuestas a seguir defendiendo nuestros derechos. No van a conseguirlo con imputaciones. Van a levantar otra vez el conflicto. No olvidemos que, hoy por hoy, se está negociando otra vez el convenio colectivo del metal".
La representación de los denunciados y de sus compañeros defiende que "la violencia contra el trabajador también se produjo en la barriada Bazán de San Fernando o en Cádiz, en una manifestación pacífica de Estudiantes, donde íbamos caminando con las manos arriba y cargaron contra nosotros, aunque hubiera por allí ancianos y personas que salían del autobús".
La CTM no se considera intimidada por el juicio de este martes: "Tenemos infraestructura, tenemos profesionales y un capital humano para seguir luchando. Lo vamos a conseguir. Para que haya carga de trabajo digna. Para que se cumplan los convenios. No es justo que a la clase trabajadora se vea en prisión por pedir sus derechos".
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