La Policía Nacional ha llevado a cabo recientemente dos operaciones contra el tráfico de drogas en la localidad gaditana de Sanlúcar de Barrameda, que han permitido desarticular una plantación de cannabis en interior y un centro de secado y distribución de marihuana. Las actuaciones se enmarcan en la estrategia de las fuerzas de seguridad para frenar la producción y comercialización de estupefacientes en la comarca de la Costa Noroeste.
La primera de las intervenciones tuvo lugar el pasado 19 de marzo, en el marco de la denominada Operación “Máquina”. La investigación, iniciada a finales de 2024 tras detectarse cultivos ilegales en la zona del Pozo de las Vacas, condujo a los agentes hasta una vivienda del Callejón Negro, acondicionada como plantación indoor. El inmueble albergaba varias estancias hermetizadas y equipadas con sistemas de climatización, iluminación LED y control ambiental, diseñados para favorecer el crecimiento intensivo de las plantas.
Más de 1.000 plantas
En esta operación fueron intervenidas 779 plantas de marihuana y detenido el principal responsable, acusado de un delito contra la salud pública. La actuación permitió también detectar un complejo entramado de cableado fraudulento para el robo de electricidad, que provocaba cortes de suministro en la zona y representaba un riesgo para los inmuebles cercanos. En total, las diligencias concluyeron con siete personas arrestadas, la incautación de 1.350 plantas, 130 kilos de cogollos preparados para su distribución y más de 9.000 euros en efectivo.
Días más tarde, en otra operación desarrollada por la Brigada de Policía Judicial de la Comisaría de Sanlúcar, se desmanteló un inmueble utilizado como almacén y centro de secado de marihuana. Las instalaciones formaban parte de la logística de distribución de las plantaciones ilegales y contaban con estanterías, bandejas y otros elementos destinados al secado y envasado del producto final.
Durante la intervención fueron localizados 30 kilogramos de cogollos en proceso de secado, cuyo valor en el mercado se estima en unos 130.000 euros, aunque podría multiplicarse considerablemente en los destinos finales. Los agentes también incautaron equipos de climatización, filtros, focos y maquinaria específica para el tratamiento del cannabis. El responsable del lugar fue detenido y enviado a prisión provisional por delitos de tráfico de drogas y defraudación de fluido eléctrico.
Estas actuaciones suponen un nuevo golpe a la estructura de producción y distribución de marihuana en la provincia de Cádiz, al intervenir tanto en el origen del cultivo como en su red de almacenamiento. La Policía Nacional ha subrayado su compromiso con la lucha contra el narcotráfico en la región, donde se están intensificando los esfuerzos para desarticular las redes implicadas en esta actividad ilegal.