'Plantar' la autocaravana o la camper a pie de playa, o en un paraje natural, amanecer ante el mar y sentirse apartado del mundo. Es la imagen que primero viene a la cabeza al hablar de estos vehículos, que de unos años a esta parte, han aumentado su presencia en España y, también, en Cádiz. Para los dueños de estos vehículos, la realidad, entre ordenanzas municipales y áreas privadas, es diferente.
En una provincia que recibe unos seis millones de viajeros al año (datos de la Encuesta de Coyuntura Turística de Andalucía de 2023), el verano puede convertirse en un problema para los propietarios de unos vehículos que son costosos, ocupan más espacio y no aportan dinero a la actividad hotelera.

Félix y María José tienen su furgoneta camper desde hace cinco años. Ambos son de Cádiz, pero residen en Puerto Real, y tienen su vehículo aparcado en el estacionamiento de Torregorda cuando lavozdelsur.es visita el espacio. En él, está prohibido acampar, aunque no está prohibido dormir allí, siempre que sea dentro del vehículo y sin ningún tipo de elemento que indique la acampada.
A un lado, la playa de Cortadura; al otro, varios vehículos de este tipo aparcados. Vienen aquí porque el resto de la provincia está "imposible", cuenta Félix. "Estuvimos a finales de junio por la zona de Conil, El Palmar…. Es increíble cómo estaba, para aparcar y de gente", relata. Y, también, de controles policiales a este tipo de vehículos. "Y eso que era la última semana de junio", apunta María José. "Terminamos en un área camper que hay en El Palmar. Allí, ya tienes que ir a un sitio como ese, sí o sí. Hay dos: una son 25 euros y la otra 19 la noche, pero te ponen luz, hay servicios, ducha... merece la pena", puntualiza Félix.

En otras áreas de servicio, el precio es menor, pero no tienen luz, o agua. En muchos municipios, según relatan, la única opción es el camping, pero suele ser "carísimo", se sinceran. Además, lo que se busca cuando se tiene un vehículo de este tipo tampoco es meterse en un camping, según cuentan. Otro hándicap es que, en las áreas camper, habitualmente hay que reservar y pagar previamente.
"Hace cinco años, cuando nos la compramos, dormíamos en cualquier sitio y no teníamos problemas, pero desde la pandemia para acá ha cambiado", relata María José. "A partir del confinamiento, fue increíble la caña que estaban dando en todos lados. Sí es verdad que hay más vehículos, más autocaravanas... Hay un boom muy grande, parece que todo el mundo quiere esto", explica Félix.
Eugenio también lleva cinco años con su autocaravana, de segunda mano. Hoy, le ofrecen 5.000 euros más de lo que pagó; un dato común y que arroja luz sobre el auge del sector. Él suele tener más problemas para moverse y estacionar que sus compañeros, por las dimensiones de su vehículo. Entiende las complicaciones que surgen en verano, pero también apunta: "No me he comprado la caravana para dejarla en un garaje. Tenemos el mismo derecho".
El auge parece estar en el alquiler, y no tanto en la compra. La plataforma de alquiler CamperDays registró en 2023 un aumento de casi un 90% en sus reservas; pero, según datos de la Asociación Española de la Industria y Comercio del Caravaning (Aseicar), las matriculaciones descendieron un 16,7%.
Los ayuntamientos, responsables de la regulación por el momento
La masificación del turismo, el auge de un tipo de experiencia más ligada a lo natural, sobre todo, tras la pandemia, y el intento de los ayuntamientos por mejorar la convivencia entre turistas, 'caravanistas' y población local; todos estos aspectos confluyen en el fenómeno de las autocaravanas y las campers.

Para responder a una de las reivindicaciones históricas del sector, que es la discriminación respecto a otros vehículos, el pasado mes de junio se inició el trámite del proyecto de Real Decreto en materia de protección a usuarios vulnerables de la vía, por el que se modificará el Reglamento General de Circulación, reconociendo el derecho de las autocaravanas a estacionar como cualquier otro vehículo de su misma categoría.
El propio preámbulo al proyecto señala que, en diez años, se ha pasado de contar con 3.000 unidades matriculadas anualmente a 9.000, y de 150 áreas especializadas a algo más de 1.000; unos datos que arrojan la necesidad de regular determinadas cuestiones de forma específica. Entre otras cuestiones, se incluye que el estacionamiento deberá efectuarse sin extender elementos propios que desborden el perímetro del vehículo, descansando sobre neumáticos, calzos o cuñas de seguridad, y sin verter fluidos procedentes del habitáculo.
Del mismo modo, en el nuevo RD se derogará un artículo que establece que "el régimen de parada y estacionamiento en vías urbanas se regulará por ordenanza municipal, y podrán adoptarse las medidas necesarias para evitar el entorpecimiento del tráfico".
Por el momento, continúan siendo los ayuntamientos los que regulan el estacionamiento, la circulación y la acampada de estos vehículos, a través de sus ordenanzas municipales.
En el caso de Cádiz, ante la problemática que se daba en determinados lugares, como son la antigua muralla del cementerio o el aparcamiento al inicio de Cortadura al principio de la Vía Augusta Julia, se ha optado por prohibir el aparcamiento de autocaravanas en ellos, algo que confirman las señales verticales dispuestas, así como agentes de la Policía Local que visitan con regularidad las zonas para avisar a los propietarios de los vehículos de que no se puede acampar, y con los que lavozdelsur.es ha podido hablar.


Desde el Ayuntamiento explican que "lo que se está haciendo ahora es estudiar la situación y buscando posible espacio. Pero lo que se ha hecho hasta ahora en la ciudad es aplicar la normativa, que impide ese tipo de vehículos en el centro histórico. Es decir, en resumen, hasta ahora se ha aplicado la normativa y se está estudiando la búsqueda de espacios". El PSOE presentó una propuesta en el pleno en marzo, que fue aprobada, para crear una zona de aparcamiento que contase, además, con un suministro energético, suministro de agua, un punto de eliminación de aguas grises y un espacio para reciclar.
En El Puerto, otro municipio en que es habitual la presencia de estos vehículos, aclaran que algunas autocaravanas pernoctan en el parking de Pasarela, pero no cuenta con servicios para recargar baterías, vaciar aguas grises o cargar agua.
En Conil, una de las localidades del litoral más vinculadas a este tipo de turismo, junto a otras como Vejer o Zahara, las áreas para autocaravanas están mayoritariamente en los campings, como explican desde el Ayuntamiento a lavozdelsur.es. Se trata de lugares "bien habilitados" para estos vehículos. De esta forma, señalan, se intenta evitar que exista una masificación de autocaravanas por la ciudad. Además, en Conil está prohibido circular en determinadas zonas, como el paseo marítimo, algo regulado en ordenanza municipal bajo sanción económica.
La convivencia con el entorno, un tema recurrente
Las voces consultadas no son ajenas a las complicaciones que puede generar la llegada a ciertos municipios de tantos turistas, algunos de ellos en autocaravana, en verano. Pero, para Félix, hay también una razón clara en las prohibiciones al sector: "Quieren que la gente veranee en los hoteles… Todo es un negocio, y la gente empezó a viajar con estos vehículos, y quizá los hoteles se llenan menos. Pero es que al que le gusta un hotel, le gusta un hotel, y al que le gusta esto, le gusta esto".
Junto a él, Nicole, de la ciudad alemana de Osnabrück, tiene aparcada su camper. Lleva tres años viniendo a España sola cada verano; es un ejemplo de la afluencia de turistas extranjeros que también escogen este medio de transporte.

Eugenio, por su parte, es algo pesimista sobre el futuro: "Al final se pondrán unas limitaciones más duras. Si ya en algunos sitios ponen las barras para que no pasemos... Y a mí me encantaría que los ayuntamientos dijeran: vamos a cobrar tres, cuatro euros por día". Y Félix completa: "Pero no van a ser tres o cuatro euros, porque en Zahara hay un sitio exactamente igual que este [Torregorda], y si vas en marzo, abril y mayo, puedes entrar y dormir sin problema. Del 15 de junio al 15 de septiembre, 19 euros diarios".
Acerca de la convivencia con el entorno y la posible suciedad, todas las voces consultadas son tajantes. "Aquí no hay ni una colilla ni hay nada. Al revés, de vez en cuando nos organizamos y hacemos batidas de limpieza", afirma Félix. "Hay de todo", señala Eugenio, "pero en general todos somos muy respetuosos".
En invierno, apuntan estos 'caravanistas' gaditanos, la convivencia con las autoridades es mucho mejor. "Con cualquiera con el que hables en esta época, no se quiere mover de por aquí, porque para llegar y no tener sitio o estar metido en un camping, no merece la pena", expresa Félix.