La Universidad de Cádiz (UCA) anunció en la noche del lunes la reanudación progresiva de su actividad académica y administrativa para este marte, tras el gran apagón eléctrico que afectó durante la jornada del lunes a amplias zonas del país. A través de un comunicado oficial, el rector de la institución, Casimiro Mantell Serrano, ha informado de la suspensión de las clases y labores en sus cuatro campus hasta las 15:00 horas de este 29 de abril.
En un comunicado hecho llegar a toda la comunidad universitaria, Casimiro Mantell explica que "ante la incertidumbre sobre la estabilidad del suministro eléctrico y en previsión de una importante afectación a lo largo de la mañana del día 29 del sistema de comunicaciones y otras infraestructuras esenciales, se suspende la actividad docente y laboral en los cuatro campus hasta las 15.00 horas".
"Los decanos/as y directores/as de centro, siempre que esté garantizada la seguridad, podrán autorizar la celebración de actividades como oposiciones o defensa de tesis doctorales", señalaba también el rector.
Por su parte, "la Gerencia establecerá servicios mínimos que den cobertura a actividades de investigación y mantenimiento que no puedan verse suspendidas".
Desde el lunes, la comunidad universitaria ha experimentado las consecuencias del corte eléctrico, que ha alterado no solo el ritmo habitual de las clases, sino también los sistemas de comunicación internos, plataformas digitales y otros servicios esenciales para estudiantes, profesorado y personal de administración y servicios.
Todas estas cuestiones pueden generar problemas en el corto plazo, como entregas de trabajos en plataformas virtuales que tuviesen como fecha límite este lunes o incluso el martes, pudiendo en cualquier caso alegar un alumno que no pudo realizar o entregar una tarea debido a estas cuestiones, que podrán resolverse aplicando cierto sentido común.
Durante la jornada de ayer, la UCA ya había alertado sobre las dificultades generadas por el apagón, que interrumpió la actividad académica en sus sedes de Cádiz, Jerez, Puerto Real y Algeciras. Aunque el suministro comenzó a restablecerse de forma gradual, las autoridades universitarias optaron por actuar con cautela ante posibles nuevos cortes.