El Sindicato Andaluz de Bomberos (SAB) en el Ayuntamiento de Sevilla ha decidido suspender los servicios extraordinarios de manera voluntaria en protesta por los supuestos incumplimientos del Gobierno local. Esta medida fue tomada en una asamblea celebrada este martes y responde a la falta de cumplimiento de varios puntos del acuerdo laboral firmado en abril de 2024. El sindicato ha instado a la administración encabezada por José Luis Sanz, alcalde del PP, a cumplir los compromisos adquiridos.
El SAB denuncia que, entre los incumplimientos señalados, se encuentran la equiparación de las condiciones laborales de los bomberos en relación a otras secciones del Ayuntamiento, especialmente en lo que respecta a las festividades de Semana Santa y la Feria de Abril. Estos colectivos, según el sindicato, deberían disfrutar de condiciones similares a las de otros sectores del personal municipal. Además, se reclama la implementación de un calendario para el pago de las horas extra atrasadas y la regularización del exceso de jornada acumulado durante estas fiestas desde 2012.
Otro de los puntos de conflicto señalado por el sindicato es la falta de cobertura de vacantes dentro del cuerpo de bomberos. Según el informe de la "plantilla presupuestaria" del Ayuntamiento de Sevilla para 2025, el servicio de prevención, salvamento y extinción de incendios cuenta con 543 plazas, pero 170 de ellas están vacantes y 12 no disponibles. Esta situación ha afectado seriamente la operatividad del cuerpo, generando una carga de trabajo adicional para los bomberos que aún se encuentran en servicio.
Ante esta situación, el SAB ha acordado dejar de realizar los servicios extraordinarios, los cuales son voluntarios, a partir del 1 de abril de 2025. El sindicato ha advertido de que esta decisión podría poner en peligro la cobertura mínima de guardias, lo que implicaría el riesgo de que algunos parques de bomberos tengan que cerrar o que haya ausencia de vehículos de altura en determinadas zonas de la ciudad. Este escenario podría suponer un peligro tanto para la seguridad de los ciudadanos como para la de los propios bomberos.
El sindicato también ha expresado su descontento por la falta de respuesta del Gobierno local a las demandas del colectivo, instando a la administración a cumplir con los acuerdos previos y a reconocer la labor de los bomberos, quienes aseguran que siempre han cumplido con su deber hacia la ciudadanía. La postura del SAB es clara: si no se toman medidas, la situación podría agravarse aún más.
Una negociación en marcha
Por su parte, el Gobierno local, a través de su portavoz, el concejal Juan Bueno, ha manifestado recientemente que sigue trabajando en la búsqueda de acuerdos con los bomberos. Según Bueno, las horas extraordinarias se están pagando, y destacó que “nadie se ha levantado de la mesa” de negociación. El concejal se mostró confiado en que se alcanzarán acuerdos satisfactorios antes de los eventos de Semana Santa y la Feria, los cuales requieren una planificación especial en los servicios de emergencias.
El conflicto entre el Ayuntamiento de Sevilla y el Sindicato Andaluz de Bomberos ha puesto en evidencia las tensiones laborales en un sector clave para la seguridad de la ciudad. La falta de personal, las condiciones laborales y la falta de cumplimiento de los acuerdos son algunos de los puntos que continúan generando fricciones entre ambos actores.
La situación actual ha dejado claro que la relación entre el Gobierno municipal y los bomberos atraviesa un momento crítico. Mientras que el sindicato continúa con sus medidas de protesta, el Ayuntamiento se muestra dispuesto a seguir negociando, aunque no se han concretado aún soluciones definitivas para resolver los problemas planteados. La atención se centrará en cómo evoluciona este conflicto en los próximos días, especialmente de cara a las festividades más importantes de la ciudad.