Aunque pasan los años, los problemas de movilidad en Sevilla persisten y se acentúan cuando llegan las fechas importantes. La ruptura del Lunes Santo y el fin prematuro de la jornada volvió a dejar en evidencia los déficits que ofrecen las infraestructuras y el transporte público. Pese a que la capital hispalense junto a su área metropolitana suman más de un millón de habitantes, la conexión con los diferentes municipios cercanos sigue dejando que desear.
No es un problema nuevo y, posiblemente, eso sea lo peor. Pese a conocerse las dificultades, cada año ocurre lo mismo en estas fechas. De nuevo, la imagen en Plaza de Armas, la estación principal de autobuses que hay en la ciudad, fue de caos. Una vez que El Museo anunció su decisión de no salir, muchos acudieron para volver a sus casas y lo que encontraron fue un tapón, decenas de filas donde distinguir una de otra era misión casi imposible y, sobre todo, una falta de autobuses palpable.
La falta de organización y seguridad también provocó algunos conflictos ya que, como es habitual en estos casos, algunas personas aprovechan el desconcierto para colarse. No fueron pocos los que estuvieron esperando más de una hora para poder regresar a sus casas debido a que en bastantes casos las líneas llegaban a cargar con media hora de diferencia.
Dificultad de los autobuses para acceder
Uno de los motivos de todo este caos en la estación es el parking situado en la entrada de Plaza de Armas para los autobuses. El constante ir y venir de coches provoca que los autobuses no puedan acceder con facilidad a la estación, lo que retrasa también las frecuencias de paso. Además hay que contar con la falta de accesos que existen en la capital hispalense. Este hecho convierte el Puente del Patrocinio en otro punto conflictivo.
Actualmente Sevilla sólo tiene una línea de metro con impacto directo en Dos Hermanas, Mairena del Aljarafe y San Juan de Aznalfarache. El resto de municipios está obligado a moverse en autobús a pesar de que la frecuencia en muchos casos es escasa y la afluencia en estos días multitudinaria. Un problema que no evitará la línea 3 de metro (a pesar de que quedan varios años para que finalice) debido a que esta atravesará la ciudad de norte a sur y no afectará a otras poblaciones.