La Guardia Civil de Sevilla ha realizado una operación en la localidad de Guillena que ha culminado con la desarticulación de una plantación de marihuana y la detección de un fraude eléctrico. La intervención, desarrollada en el marco de la Operación Itálica 138 BOKLUK, se llevó a cabo tras sospechas de tráfico de drogas y defraudación de fluido eléctrico.
Los agentes, durante la investigación, detectaron que la vivienda en cuestión estaba conectada ilegalmente a la red eléctrica general. Además, el elevado consumo de energía, inusual para un domicilio familiar, hizo sospechar que en el interior de la casa se realizaba un cultivo de marihuana de tipo indoor.
Tras obtener la correspondiente orden judicial, la Guardia Civil procedió al registro del inmueble. Como resultado, se hallaron 224 plantas de marihuana con un peso total de 10.985 gramos. El valor estimado de la droga en el mercado se calcula en unos 20.480 euros. Además de la plantación, en el domicilio se encontraron diversos equipos y herramientas necesarios para el cultivo de la marihuana, lo que confirma la existencia de una instalación dedicada al tráfico de estupefacientes. En la casa vivía un padre con la familia, entre los que se encuentra un bebé de apenas seis meses, según añadía ABC.
Durante la operación, también se incautaron 15,6 gramos de MDMA en forma de roca, junto con 815 euros en efectivo, fraccionados en billetes de distinto valor. Se sospecha que el dinero proviene de la venta de drogas.
Asimismo, los agentes hallaron una pistola de aire comprimido en el lugar, que también fue incautada. Este tipo de arma, aunque no letal, añade un elemento de riesgo al caso. En cuanto al fraude eléctrico, técnicos especializados determinaron que la vivienda estaba conectada de manera ilegal a la red eléctrica. Tras confirmar esta irregularidad, procedieron al corte del suministro y a la evaluación del fraude cometido.
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