Operativo policial contra los hackers prorrusos en España. La Guardia Civil ha detenido a tres personas de nacionalidad española en las localidades de Huelva y Sevilla, así como en la balear de Manacor, por su presunta participación en ciberataques de denegación de servicios contra instituciones públicas y sectores estratégicos de España y otros países de la OTAN.
La Guardia Civil ha procedido al registro de sus domicilios, interviniendo diverso material informático y documental de interés. Estos ataques informáticos han sido organizados por el grupo hacktivista ‘NoName057(16)’, nacido tras el inicio del conflicto bélico derivado de la invasión de Ucrania por parte de Rusia y uno de los más activos desde ese momento.
El instituto armado ha informado este sábado de que los detenidos habrían participado en la realización de ataques de denegación de servicios (DDoS), como colapsar páginas web, organizados por el citado grupo de hackers que nació tras el estallido del conflicto bélico y que amenaza con responder “proporcionalmente en respuesta a las acciones hostiles y abiertamente antirrusas de los rusófobos occidentales”.
Estos ataques, en los que se ha empleado un software desarrollado por el grupo, se han dirigido contra instituciones públicas y empresas de sectores estratégicos de países que se han posicionado a favor de Ucrania. Tras las detenciones la Guardia Civil procedió al registro de los domicilios de estas personas, así como a la intervención de diverso material informático y documental de interés.
Se trata del mismo grupo que ya atacó en mayo de este mismo año a la web de las Cortes Valencianas, de la Casa Real y del Gobierno de Asturias, y que también puso en jaque a los parlamentos autonómicos del País Vasco, Murcia, Navarra, Alicante y Canarias.
La investigación ha sido coordinada por la Fiscalía de Sala de Criminalidad Informática y la Fiscalía de la Audiencia Nacional, donde se iniciaron las diligencias previas que han dado origen a las detenciones. La Guardia Civil ha indicado que continúa con varias líneas de investigación para seguir identificando a participantes en los ataques.
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