El embalse de Melonares, situado entre los términos municipales de Castilblanco de los Arroyos y El Pedroso, en la provincia de Sevilla, es el más grande y moderno de la provincia.
Este embalse, dedicado exclusivamente al consumo humano, tiene capacidad para 185,6 hectómetros cúbicos y se encuentra actualmente al 100%, por lo que está desembalsando, como se puede comprobar en las espectaculares imágenes de dron que acompañan a este artículo.
Y es que después de las últimaslluvias, la red de embalses de la Empresa Metropolitana de Abastecimiento y Saneamiento de Aguas de Sevilla (Emasesa) contabiliza agua acumulada por encima del 97% de su capacidad máxima, después de un mes de marzo con copiosas lluvias tras el paso del tren de borrascas.

Esta cantidad de agua serviría para abastecer a Sevilla y los once municipios pertenecientes a la red durante seis años. Desde mediados de febrero los pantanos han embalsado agua equivalente a un año de consumo y se encuentran actualmente con 623,59 hectómetros cúbicos de agua.
Con un mes de marzo con más lluvias de lo habitual, las reservas han aumentado notablemente tras el paso de borrascas por la provincia que han puesto al límite de su capacidad, alcanzando en algunos casos el nivel rojo por riesgo de desbordamiento en el caudal de los ríos.
Como es el caso del embalse de Melonares, que desembalsa al llegar al límite de su capacidad. Hace justo un año, apenas sobrepasaba la mitad, con el 58% de agua que puede acumular.
Le sigue el embalse de Zufre, que casi ha alcanzado su capacidad máxima de 175,27 hectómetros cúbicos, con un 99,2%. También el embalse de Aracena que dispone en estos momentos de 125,16 hectómetros cuadrados, es decir el 97,3% de su capacidad.
El pantano de Minilla (90,4%) dispone de 52,28 hectómetros cúbicos de los 57,8 de su capacidad, y el embalse de Cala, localizado en El Ronquillo, se encuentra con un 87,7%, es decir 51,56 hectómetros cúbicos de agua embalsada.