La huelga de Amazon en Dos Hermanas ha llevado a las protestas a una plantilla de casi dos millares de personas, en uno de los centros más grandes de Europa, donde se recepciona y distribuye mercancía para buena parte de la Península. La huelga no ha tenido avances, según explican representantes sindicales de UGT, y ya se esperan nuevas concentraciones y paros generalizados tras los del lunes, el primer día de conflicto laboral.
El presidente del comité de empresa, Luis Miguel Manzano, de UGT, explicaba tras las primeras horas de la huelga que "no nos ofrecen fórmulas para adaptarnos a la pérdida de poder adquisitivo". La principal demanda de esta huelga tiene el siguiente contexto: cuando la plantilla fue contratada, lo hicieron con una suma por encima del convenio del sector. Al haberse renovado este convenio en verano, esa subida pactada previamente ha quedado 'absorbida', por lo que la plantilla deja de estar en la misma proporción por encima.
Según Manzano, la categoría más habitual de la plantilla veterana, la que lleva tres años, la que no depende de picos de trabajo -como ahora en Navidad- es mozo especialista. Ronda los 1.300 euros por 40 horas semanales, "en 12 pagas y trabajando dos domingos". Cuando entró a trabajar, Manzano llegaba "a los 1.400 euros. No tiene sentido que cuando llevas más tiempo te quitan beneficios".
Otro de los elementos que demandan es que los festivos no se computen como descansos. Es decir, que si se trabajan seis días y toca descanso en un día que es una festividad, se recupere ese festivo, porque en la práctica supone perderlo. "Hay un acuerdo firmado en el Sercla" -la mediación pública- "donde se reconoce que debe ser así, pero no lo aplican".
Rocío Fernández es enlace sindical también de UGT. Preguntada por cómo es el ambiente en estos días en que hay tanto paros como trabajo -la huelga indefinida no es en este caso una paralización completa, sino que no se trabajó el lunes y no se hará tampoco en algunos de los próximos días-, indica que se nota "tensión".
De hecho, Fernández afirma que "algunos mandos nos están diciendo que la huelga es ilegal, que la huelga es una locura, es un ambiente tenso", por lo que habla de "presiones" de la empresa. Manzano va más allá: "Están vulnerando el derecho a la huelga al meter miedo a la plantilla, son coacciones en base a una mentira, diciendo que van a ser multados por ir a esa huelga". Fernández señala también una relación "con Recursos Humanos que no es buena, acuden antes al comité que a ellos para informarse de cualquier asunto".
Respecto a si trabajar en Amazon es diferente a trabajar en otras empresas al uso, Fernández responde que "quieren ser como psicólogos". Y abunda: "Te absorbe en un mundo 'happy' pero vuelves a casa cansado y con el salario mínimo. Todo es un tono dulce. El otro día en la cantina hicieron un sorteo de gofres con chocolate. No quiero gofres, queremos nuestros derechos adquiridos", remacha.
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