Hace una década que se empezaron a formar los mimbres de lo que hoy es OGA, una empresa que usa la Inteligencia Artificial para "aportar valor a las empresas", mejorando sus procesos de negocio, solucionando problemas complejos relacionados con la logística o la fabricación, con el consumo energético o con la optimización de recursos. La compañía nació en 2021, tras ser consultora tecnológica durante más de una década.
Con sede central en Sevilla, OGA no ha parado de crecer desde su nacimiento. Ya cuenta con 70 empleados, que son andaluces, pero también de otras regiones de España e incluso de otros países. "Aplicamos Inteligencia Artificial (machine learning y deep learning) y la Investigación Operativa (optimización de procesos), dependiendo del reto, o una hibridación de ambas", explica Manuel Miranda Sánchez, que forma parte del equipo de desarrollo de negocio y marketing de la compañía.
OGA viene a resolver problemas "que son difíciles de solucionar por su dimensión o por la rapidez con la que hay que solucionarlos, apoyándonos en las matemáticas y en la tecnología", incide Miranda, que define al CEO de la empresa, Juan Carlos Rubio, como un "visionario" que supo anticipar el giro de muchas grandes empresas hacia lo que se conoce como Data Driven, una forma de tomar decisiones basándose en el análisis de datos. "La compañía empezó su propio proceso de transformación hasta el día de hoy, que nos dedicamos exclusivamente a eso", insiste.
OGA es una de la treintena de compañías que tienen su propio stand en la XI Feria de la Innovación y las Nuevas Tecnologías que organiza Inpro, la Sociedad Provincial de Informática, dependiente de la Diputación de Sevilla. Precisamente la institución provincial, junto a la Confederación de Empresarios de Sevilla, le concedió recientemente uno de los Premios de Responsabilidad Social Empresarial y Sostenibilidad 2024, concretamente en la categoría de pyme.
"Los problemas de las empresas se dan en muchos frentes. Hay empresas que tienen un reto logístico complejísimo, o del sector químico, que es difícil de gestionar", relata el responsable del equipo de desarrollo de negocio de OGA, que trabaja para multinacionales como Roche, Coca Cola Europacifics, Heineken o Acerinox. "Tenemos muchos retos en muchos sectores y todos muy complejos", agrega Manuel Miranda.
La irrupción de la Inteligencia Artificial, que OGA utiliza para ayudar a sus clientes a mejorar sus procesos internos —para contaminar menos, para optimizar gastos, para reducir tiempos de respuesta...—, provoca cierto recelo entre quienes desconocen los buenos usos de esta tecnología. "Hablar de Inteligencia Artificial es algo bastante etéreo, pero cuando utilizas un modelo de IA para un tema concreto, desaparecen los posibles miedos que se puedan tener, porque se ve una aplicación clara y eficiente", sostiene Miranda.
"La parte de la Inteligencia Artificial más conocida es la generativa, pero hay cuatro niveles: la descriptiva, que describe un escenario; la predictiva, que te dice lo que va a pasar; la prescriptiva te dice qué tienes que hacer para potenciar un determinado hecho que se va a dar en tu empresa; y la generativa, que es la que todo el mundo conoce", describe Manuel Miranda, responsable de desarrollo de negocio y marketing de OGA.
La empresa, que se preocupa de que sus procesos "tengan una validez tecnológica y académica muy alta", por eso creó en 2022 un consejo asesor tecnológico de OGA, llamado Grupo Cátedra, formado por 13 catedráticos e investigadores de diez universidades, desde Sevilla a Granada o Málaga, pasando por la Rey Juan Carlos (Madrid), la de Valencia, la de Burgos o la de Boulder (Colorado, EEUU). "El talento lo buscamos allí donde esté", reseña Miranda. Una premisa que en OGA tuvieron clara desde el primer momento.
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