PP y Vox pactan en Sevilla eliminar el recargo en el IBI a los dueños de viviendas vacías

El Ayuntamiento logra abrochar el apoyo de los de Abascal tras una tensión de meses que finalmente se recondujo

José Luis Sanz y el delegado de Hacienda, Juan Bueno, que ha pactado con Vox las ordenanzas fiscales y la bajada del IBI.

El Partido Popular ha aceptado en la comisión de Hacienda del Ayuntamiento de Sevilla varias enmiendas a las ordenanzas fiscales presentadas por el grupo municipal de Vox, con quien las relaciones se han normalizado tras un año de tiras y aflojas. Según señalan desde el partido de Abascal, se trata de un "cambio de rumbo del PP", que "obedce en gran medida a que el gobierno municipal es consciente de que las propuestas de Vox benefician al conjunto de los sevillanos, y por ende, a la ciudad", explica la portavoz, Cristina Peláez.

En una nota, Vox señala que entre las enmiendas afectan a varios de los impuestos, aunque se centra especialmente en el IBI. Una de ellas es la bonificación para familias numerosas, bajando el impuesto. Pero también, un cambuo en el número de inmuebles que un ciudadano puede tener aparte de su vivienda habitual. Es decir, que multipropietarios podrán disfrutar de la bajada del impuesto de bienes inmuebles.

Y hay más. Porque otra de las modificaciones de cara al IBI del año que viene hace referencia a las viviendas vacías. En concreto, la nueva ordenanza retirará al completo el recargo para los dueños de casas vacías, que ya no verán incrementada la cifra en un 50% de la cuota líquida. Para viviendas con más de seis años en situación de desocupación, se pagaba directamente el doble de IBI, y que aún se incrementaba un 50% adicional si además se era propietario de varias viviendas.

Medidas todas enfocadas a castigar a quienes no hacen uso de las viviendas y además no las ponen en el mercado. El artículo, eso sí, incluía razones por las que un propietario podía justificar el cierre de la vivienda, como razones de salud, emergencia, estar siendo rehabilitada o en mitad de una disputa judicial, además del mero hecho de haber sido puesta a la venta o al alquiler. 

"Rebajar las tasas y tributos desde el sentido común sólo puede suponer beneficios, mientras que otras políticas, como las de la izquierda, se han demostrado no sólo inútiles sino lesivas para los sevillanos y a la postre para las arcas públicas", señalan desde Vox.  "Lo tenemos muy claro. No sólo vamos a defender nuestras propuestas para intentar evitar el infierno fiscal al que nos someten socialistas y comunistas, sino que vamos a protegernos de ellas utilizando nuestros votos y la influencia que podamos ejercer en este Ayuntamiento. Vamos a combatir las políticas de izquierda con todas nuestras fuerzas porque son malas para los sevillanos y a la vista está".

Será en el pleno donde se presente la propuesta aprobada en comisión, así que queda el trámite para que se haga efectiva la rebaja el IBI. Pero ahora, y después de mucho tiempo, parece que Sanz tendrá un pleno tranquilo donde sabe que tiene votos abrochados. La mejor victoria que se apunta Sanz tras la reconciliación con Vox es los pisos turísticos, ya finalmente limitados en los barrios del centro y de Triana.

 "El alcalde Sanz parece que se ha dado cuenta que toda influencia socialista en la gestión de la ciudad no funciona y hace daño, algo que ya sabíamos a ciencia cierta en Vox. En este caso, aplicaremos el dicho popular de que no hay mal que por bien no venga", remachan desde el partido de Abascal.

El delegado de Hacienda, Juan Bueno, ha explicado que han tendido la mano a todos los grupos políticos, no solo a Vox, y que las ordenanzas fiscales para 2025 están diseñadas "para apoyar a las familias numerosas, a los negocios afectados por las obras y a los comercios emblemáticos de Sevilla". Así, desde el gobierno local califican estas medidas como "mantener una política de bonificaciones para quienes más lo necesitan y, al mismo tiempo, seguimos en la senda de la bajada de impuestos, congelando todas las tasas locales y los precios públicos, salvo en el caso del Real Alcázar, donde ajustaremos las tarifas para eliminar disparidades".

Por su parte, el socialista Antonio Muñoz lamentaba el acuerdo con Vox para eliminar los recargos del IBI: "Ante el problema de la vivienda para las familias y los jóvenes de Sevilla, claudica ante los grandes especuladores y habrá más pisos turísticos, al tiempo que evita imponer penalizaciones fiscales para quienes acumulen viviendas desocupadas, restándolas así del mercado de alquiler".