El Parque de Bomberos de Pino Montano, en Sevilla, lleva dos días sin abrirse por falta de personal. En el resto de recintos donde trabajan estos empleados municipales, las pancartas reivindicativas cuelgan de las paredes desde principios de semana. La más importante, la que está bajo el puente que lleva el nombre del colectivo, no es una excepción.
En pocos días, ese puente vivirá un momento muy especial con la Hermandad de San Bernardo de vuelta. Lo que no sabemos es si en ese momento las reivindicaciones seguirán a la vista de todos. La situación actual hace indicar que sí. La dotación mínima de bomberos en Sevilla es de 60, sin embargo, en los últimos días, están yendo a trabajar entre 15 o 20. Uno de los motivos es que falta personal en el cuerpo. El otro, que los trabajadores se han negado a realizar horas extras.
"Todo viene porque en abril de 2024 el Ayuntamiento firma un compromiso con todos los sindicatos de bomberos. El acuerdo tenía nueve puntos y sólo se han cumplido dos", señala Antonio Núñez, representante sindical de los bomberos en el Ayuntamiento de Sevilla. Los trabajadores del cuerpo insisten en que el principal problema es la falta de personal por los años acumulados sin convocar plaza, algo que aumenta la carga de trabajo. "Hacemos el servicio de manera crítica".
Por ello, los bomberos de Sevilla han decidido, tras un año sin que se cumplan estos compromisos, no realizar los servicios extraordinarios, algo que es voluntario. "No estamos en huelga", aclara Núñez a lavozdelsur.es. Además, dar un paso más en las protestas es algo que no se contempla por respeto a la ciudadanía. "No creemos que necesiten eso".

La situación más compleja se ha vivido en Pino Montano, uno de los barrios más al norte de la ciudad. "No se cubre el mínimo y los que han ido a trabajar se han distribuido por otros parques porque no hay gente", explica el representante sindical.
Esta decisión, además, ha provocado consecuencias en el cuerpo. "Hay que sumarle que decidimos hacer servicios extraordinarios y nos quitan los permisos por asuntos propios y las vacaciones. Nos lo están denegando", afirma sobre la situación que están viviendo. Todo ello ha provocado cierto malestar en la plantilla, pero también una unión que "hacía años" que no había. "Está toda la plantilla unida porque cuando a la gente le tocan el sueldo y los permisos...", comenta Núñez.
La situación de la Semana Santa y la Feria
Los bomberos viven una situación límite y la falta de entendimiento por parte del Ayuntamiento puede poner en dificultades la seguridad de la ciudad en las fechas que se aproximan. La Semana Santa y la Feria son dos momentos en los que Sevilla multiplica el número de habitantes y además los concentra en pequeñas calles.
La falta de personal tiene consecuencias directas. "Los retenes de Semana Santa y Feria no se montarían porque ni siquiera se están cubriendo las guardias de los parques", explica Núñez. Esto significa que los tiempos de respuesta en la ciudad se multiplicarían y que cualquier incidencia en el centro, debido a las aglomeraciones, provocaría que se tardase mucho más en llegar al sitio. Un hecho que, con los retenes dispuestos por las calles, no ocurriría.
Agravio con otros colectivos
Fuentes de la plantilla señalan que actualmente las negociaciones están bloqueadas. De hecho, este jueves se ha celebrado una asamblea en la que ha habido unanimidad para seguir con las protestas. "La oferta que ha hecho el Ayuntamiento es irrisoria", señala el representante sindical. El cuerpo pide la equiparación con otros servicios municipales, a los que se les han aprobado mejoras para las fiestas primaverales y se les han mejorado las condiciones laborales durante todo el año.
Este jueves se ha pronunciado el alcalde, José Luis Sanz. El popular ha señalado que ahora, cuando llega la Semana Santa o la Feria, "nos acordamos todos de las reivindicaciones que llevamos años haciendo. Pero creo que el colectivo de bomberos es uno de los primeros del que nos hemos acordado cuando llegamos al Ayuntamiento".

"En casi dos años que llevamos es imposible que solucionemos los años de abandono al que se tenía sometido el colectivo. Creo que todas las reivindicaciones que hacen son justas, pero en este tiempo es imposible conseguirlo todo", ha indicado el regidor, al tiempo que ha apelado a la responsabilidad y profesionalidad "de los que en el día a día, con su trabajo y con su esfuerzo, consigue que esta ciudad sea mucho más segura".
Ello, ha abundado Sanz, pensando en "su vocación de servicio público y la complejidad que siempre tiene la organización de nuestras Fiestas de Primavera". "Insisto, seguramente tendrán razón en muchas de las reivindicaciones que hacen, pero hacía muchos años que no llegaba un gobierno que desde el primer momento se acordara de las condiciones indignas en las que estaban trabajando los bomberos en los parques de bomberos".