Un libro de política para todos
Antonio Conde (Jerez, 1963) tenía claro que quería hacer un libro sobre el municipalismo alejado de lo técnico; ir directo al grano para que Municipalismo, pasado, presente y futuro (Editorial Makinable) fuera entendido por aquellos a los que le interesan los temas políticos y las administraciones públicas, pero también para que todo el lego en la materia pueda comprender sin dificultades qué es el municipalismo y todo lo que gravita a su alrededor. El trabajo recorre, además, la historia del municipalismo desde la antigua Grecia a nuestros días.
Antonio Conde Argudo es politólogo, y, según sus palabras: "vecino activo de convicción y Quijote del siglo XXI, sin miedo a los molinos de viento".
Durante cuatro años fue concejal en el Ayuntamiento de Jerez.
Durante el año y pico que estuve recopilando información, más los nueve meses que he estado escribiendo el libro, te puedo decir que doy pinceladas del municipalismo, empezando por las raíces desde la antigua Grecia. El libro nace por mis ansias de conocimiento. Y entre esas cosas, he aprendido que en esos libros no se habla del nacimiento y del porqué del municipalismo. También te digo que no he encontrado antes un libro en el que se destaque que el municipalismo europeo tuvo mucho que ver en la independencia de América.
Efectivamente. La Revolución Francesa marcó un hito en cuanto a que fue un foco de atención en otras partes del mundo. Los independentistas americanos se fijaron mucho en ella para ir expandiendo esa idea.
"La Revolución Francesa marcó un hito porque fue un foco de atención en otras partes del mundo"
He intentado hacer un libro que pueda entender cualquier persona. No es un libro técnico, aunque tenga una parte que sí lo sea, aunque está explicado de forma amena. He quitado toda la paja que engordan un montón de libros que llenan páginas y páginas que al final no dicen nada.
El gran problema es que, en 1978, con nuestra Constitución, hay una primera descentralización del gobierno central a las autonomías, pero queda pendiente una segunda que es la de la de las autonomías a los ayuntamientos, que son las entidades más cercanas al ciudadano. Esas son las que dan un servicio más directo, pero para eso hay que otorgarles competencias y dotación presupuestaria.
Se ha pedido, pero con la boca pequeña. Pero es necesario que se pida esa dotación presupuestaria. ¿Por qué? Te puedo decir que el 25% o el 30% del presupuesto de un ayuntamiento se gasta en competencias impropias. Esto quiere decir que los ayuntamientos han asumido competencias de otras administraciones, pero que cargan con ellas por ser la figura más cercana al ciudadano. Algunas veces esto pasa por intereses políticos y otras veces por la necesidad de prestar esas competencias. Es un pellizco importante que se resta al presupuesto municipal. Esa segunda descentralización es necesaria para que los ayuntamientos avancen.
Sería avanzar. Pero no es utópico. Es una necesidad. No es nada difícil. Todo se consigue reivindicando y dando a conocer la necesidad de tener esas prestaciones y partida presupuestaria para darlas. Utópico hubiese sido que nacieran diferentes municipalismos después del movimiento del 15-M que tuvimos, ¿no? Pues nacieron otros, pero con un nexo común, que es la cercanía con el ciudadano; pero todos tienen una idiosincrasia diferente: el municipalismo feminista, por ejemplo, reivindica la participación de la mujer en la gestión de las actividades más directas. Hay un municipalismo libertario que quiere usar las administraciones más cercanas al ciudadano para contrarrestar las políticas neoliberales que se puedan hacer desde otras administraciones. Hay muchos ejemplos.
Municipalismo es todo. No solo he estado en el movimiento vecinal. He estado cuatro años como concejal. Conozco todo esto por haber estudiado Ciencias Políticas, y conozco la realidad social de la ciudad a través de la ONG en la que soy voluntario, Iniciativa Solidaria Jerezana.
"El movimiento vecinal también es municipalismo"
Lo mínimo que debe saber es lo más básico. Y lo más básico es el reglamento orgánico municipal, que es como se rigen los ayuntamientos. Pero si ahondas un poco, y te hablo de la ciudad de Jerez, sí es verdad que el decoro se ha perdido. Estamos viendo mucha soberbia últimamente de algunos políticos que nos representan y que no tienen ningún respeto en el órgano de debate más importante, que es el pleno. Vemos una vez sí y otra también, que se salen de las formas y, sobre todo, vemos actuaciones que no deberían de ser.
Y analizar si en cuatro años una ciudad se levanta o se termina de hundir. Yo no creo que el que se dedique a esto tenga que tener un currículo brillante para estar en política, pero si tiene que tener el interés suficiente para gestionar, sobre todo, el dinero público, que es el dinero de todos.