Ley y conciencia
Eduardo Díez (Jerez, 1963), veterinario con 35 años de experiencia, lo tiene claro: La Ley de Bienestar Animal (que entró en vigor el 29 de septiembre del recién acabado 2023) tiene sus luces y sus sombras. Hay puntos discutibles y otros que, para este profesional de la medicina veterinaria, son un acierto.
En todo este tiempo, Díez constata que la gente, por lo general, tiene una responsabilidad más acusada a la hora de tener una mascota y hacerse cargo de ella de la manera más correcta, incluido el gasto que haga falta para los tratamientos y su cuidado. Por contra, hay quienes se hacen con dos, tres o cuatro perros o gatos y luego no pueden hacerse responsables de tantos animales. Eduardo Díez recuerda que tener animales no es una obligación: "Esto es una decisión personal, y si no va a poder atenderlos luego, es mejor que no los coja".
No creo que podamos decir que lo sea. De todas formas, el tema es muy extenso. Lo que está claro es que cuando salió la Ley se publicitó aquello que llamaba más la atención.
Aquel punto donde dice que los animales no pueden ser atados en el exterior. En ese punto no puedo estar de acuerdo. Es verdad que un animal no puede estar atado fuera sin supervisión de los propietarios, pero si tú entras cinco minutos en una farmacia y dejas al perro fuera, no veo que haya que poner una multa por eso. Si en el sitio no te dejan entrar con la mascota, lo lógico es que puedas dejarla fuera.
Tampoco estoy de acuerdo, pero ojo, mientras las condiciones meteorológicas no lo impidan. Lo mismo el perro está más tranquilo en el coche durante un rato mientras espera.
"Lo mismo un perro, con las condiciones meteorológicas favorables, está más tranquilo esperando dentro de un coche"
Eso es muy importante. La mascota se te puede escapar, puede provocar un accidente o puede hacer caer a una persona. El propietario debe estar respaldado por un seguro por el daño que pueda provocar.
Estoy de acuerdo. Un curso gratuito con unas nociones básicas para antes de tener un animal de compañía. Pero vamos, igual que lo haría a los padres con sus hijos. Hay que tener unas nociones de educación, y aquí se trata de lo mismo. Una persona que no es educada no va a educar ni a sus hijos ni al perro. Todos esos puntos han hecho que muchos propietarios decidieran deshacerse de los animales. Entonces, las protectoras, las perreras municipales, se han visto absolutamente desbordadas, de tal manera que no han podido admitir ni una sola mascota más. Eso es un problema enorme.
Es que no tienen subvenciones, no tienen ayudas. No pueden mantener a más animales. Hay puntos de la Ley que son buenos y otros que no lo son tanto. Los perros de cacería, por ejemplo. No sé por qué los han dejado fuera de la Ley. Se quiere proteger a los animales y veo, por mi trabajo, que muchos de ellos, no digo que todos, son los que menos cuidados les proporciona el propietario. Les ponen la vacuna obligatoria y poco más. Luego en jaulas hasta que llega la época de cacería. Eso es lo que hay que vigilar.
Yo estoy de acuerdo. Lo primero que hay que hacer es acudir a los expertos. Se podría haber hecho una encuesta, y que, con respecto a eso, se elaborara la Ley.
Estoy de acuerdo con que no se sacrifiquen animales sanos, pero dice la Ley que "ni por condiciones económicas". Pero es que hay personas que no pueden hacerse cargo porque la medicación o la cirugía es cara y no se la pueden permitir. ¿Qué va a hacer esa persona? Es un sacrificio humanitario. ¿Dejamos al animal haciéndose pipí y caca encima? Hay casos como este que sí deberían estar recogidos en la Ley.
Es que esto no puede ser testimonial. Se multa a alguien de forma aislada, pero hay que perseguir estos comportamientos y multarlos. Poco a poco se irá educando. Lo que no puede ser es la dejadez que hay con eso. Para otras cosas se persigue a los dueños, como lo que hablábamos de dejar a atados a los perros. Es como la Ley del Tabaco. Parecía que nadie iba a cumplirla, y todo el mundo se acostumbró.
"No se puede perseguir a los dueños de las mascotas para unas cosas sí, y para otras, no"
Para eso están los criadores, que están dados de alta y es un negocio legal. Tú no puede criar con una mascota y vender las crías como diez veces menos que lo que te lo vende un criador. Estás haciendo una competencia desleal ahí. Y además no son expertos. Veo bien que haya un control.
No estoy de acuerdo. Hay personas que saben que le van a regalar un perro o un gato y son conscientes de que va a aumentar la familia, entonces van a cuidar a sus mascotas. Ahora bien, regalar un perro a alguien que realmente no está preparado no es lo correcto. Es como si se lo regalas a un niño. Primero hay que hablarlo con los padres, que son los que se van a ocupar del animal. Pero si los padres no quieren perro, ese animal acabará siendo abandonado, en una protectora o una perrera.
No es verdad, no es verdad. Solo hay que darse una vuelta por la perrera municipal o por cualquier protectora y verás que hay tantos perros de pura raza, como perros mestizos. Sí es verdad que quien se compra un perro de pura raza y se gasta un dinero, es una persona responsable y se va a hacer cargo. Pero de todo hay en la viña del Señor.