Un hallazgo literario y experimental
Antonio Miguel Moreno Hidalgo (Jerez, 1977) no es escritor de nacimiento, por decir así. Se confiesa "ávido lector desde pequeño", así que lo de escribir es nuevo, y más nuevo aún probar con una disciplina literaria tan exclusiva como es la literatura experimental, que utiliza las nuevas tecnologías para ser aplicadas a los textos que escribe, y cuyos finales o desarrollos se alejan del papel para trasladarlos igual a un código de barras que a un QR. También combina el texto escrito con el cortometraje que continúa, con imágenes, la narración de la letra impresa.
Electrónico de profesión —auque actualmente es docente de formación profesional para el empleo en El Puerto de Santa María—, ha trabajado en la electromedicina, o lo que es lo mismo: arreglando aparatos de rayos X o cualquiera de la delicada maquinaria médica que se usa habitalmente en las consultas y hospitales. Lo de Moreno Hidalgo es un doble hallazgo: literario y experimental.
Aunque el libro está dividido en dos partes, la primera parte son relatos cortos y la segunda está centrada en el genero experimental
Si te gusta la lectura no es un género de los más populares, podríamos decir. ¿Qué te puedes encontrar en la literatura expriemental? Lo que busco es innovar la técnica y encontrar nuevas vías de comunicación entre el lector y el escritor. Te puedes encontrar poesía escrita en códigos de barras, o un relato cuyo desenlace está en un código QR; o puedes tener un relato escrito en las seis lenguas oficiales de España, pero sin traducir, en un intento de mostrar la riqueza lingüisitca de un país como el nuestro. Es algo positivo, un nexo de unión, no de división.
"El público más joven se engancha más, porque se aleja del método tradicional de lectura de cualquier libro al uso"
Claro. Yo cuando me he encontrado con el lector más joven —que yo tengo ya una edad (se ríe)—, al no ser el texto unidireccional, se interactúa con un código de barras o un QR, o incluso está escrito de forma que la mitad del relato esté impreso y la otra mitad es un cortometraje. Esto hace que el lector quiera descubirlo de una manera diferente.
De esta forma he visto que al público más jovencillo le engancha más, aunque solo sea para ver cómo es, cómo funciona, porque se aleja del método tradicional de lectura de cualquier libro al uso. Hay que utilizar el móvil o cualquier dispositivo electrónico, y eso es novedoso. Te bajas aplicaciones, es más dinámico.
"Lo que busco es innovar la técnica y encontrar nuevas vías de comunicación ente el lector y el escritor"
Yo soy lector empedernido. Hay grandes literatos, y uno sabe que no va a llegar a esos niveles. Puedes hacer tus relatos, aportar tu imaginación, etcétera, pero lo que es técnica de escritura, como en la poesía, por ejemplo, aportar algo nuevo o de calidad es difícil. De alguna forma todo está completamente inventado, por lo que he intentado es darle la vuelta a la forma, hacer partícipe al lector y contar las cosas de otra manera. Pero hacerlo más asequible o entretenido. Y, si es posible, ser la primera vez que se hace.
No, por supuesto, se puede aplicar una idea a cualquier otra faceta del arte. Pero yo lo que quería es ser pionero, comunicando historias de otra forma y demostrar que es posible.
Aparte de tener una idea, siempre temes: ¿esto lo habrá pensado otro? Porque somos muchos los que hemos podido pensar en esta fórmula. Entonces todas esas cosas te las planteas. Tienen mucho trabajo de biblioteca y de la herramienta que tenemos todos, que es internet. Para determinadas páginas he buscado que no hubiera nada igual, y si lo había, darle mi toque para diferenciarlo.
"Aparte de tener una idea, siempre temes: ¿esto lo habrá pensado otro?"
Yo he buscado la manera de contar una historia que quizá ya esté contada, pero hacerlo de forma diferente. Igual se le ha ocurrido a alguien en la China o en la India, pero no creo que sea algo habitual. Yo lo que busco es que el lector me diga que la historia le ha gustado más o menos, pero la forma en la que se la ha comunciado es completamente nueva.
Al estar dividido en dos partes, con una primera parte de la que ya hemos hablado, que es más clásica como son los relatos, te aplaca un poquito, no estás demasiado nervioso. Con un libro 100% de escritura experimental corres el riesgo de chocar con aquel lector que está acostumbrado a la lectura tradicional de toda la vida.
Hay gente a la que le ha gustado y otra que se ha quedado más descolocada, pero en general estoy satisfecho porque ha gustado. Insisito de todas formas en que los lectores potenciales son chavales jóvenes, alumnos de instituto que se han visto reflejados con los tiempos que corren.
El relato corto está porque es mi género favorito, y el número, que son siete, no está escogido al azar, es por los 7 viajes de Simbad el Marino. Pero también me encanta Poe, Lovecraft, que son relatos de terror, de suspense, géneros que me gustan. Yo no iba a mejorar nada de lo que ellos han escrito, como te hablaba antes. Lo puedo poner de otra forma, en otra época, pero es luchar contra gigantes: es una forma de homenajear ese estilo. Mi obsesión era la forma de encontrar algo diferente.
Yo creo que ha soprendido todo con algo tan distinto y con una editorial pequeña. Los sellos grandes no arriesgan tanto, y menos con autores desconocidos. Quizá ha gustado tanto eso porque que no se lo esperaban.
Es que esa era la idea unir texto escrito con sonido e imagen: te metes en la historia. Tiempo atrás esto no se podía hacer.
"El libro electrónico ya se ha comido al libro en papel. Yo quería hacer algo que fuera más allá"
Si interpretamos la normalidad como lo que es más habitual, está claro que se sale de la norma, pero yo creo que, en cierta forma vamos por ahí. De hecho, el libro electrónico ya se ha comido al libro en papel. Yo lo que quería hacer es algo que fuera más allá.
Es que siempre hablamos de lo mismo, esos son libros que manejan las grandes editoriales en su división electrónica, como es Amazon, por ejemplo, que tiene un gran catálogo todas las semanas, aunque son libros con un coste elevado a pesar de ser electrónicos. Pero todas las semanas, por contrapartida, hay libros gratuitos o a 0,99 euros, pero claro, son libros de autores noveles como yo. Encuentras libros económicos, pero apostando por escritores nuevos que no son de renombre.
Ese el primer escollo, podríamos decir, que se encuentra quien quiere dedicarse a este oficio. Yo esto lo hago por hobby, porque soy lector empedernido, pero no tiene que ver con mi profesión. Fuera de los circuitos de las grandes editoriales no se puede vivir.
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