Inma Nieto: "La estrategia del PP no tiene nada que ver con los intereses de Andalucía"

Pregunta. Apenas queda un año de legislatura. ¿Qué balance hace?

Respuesta. El Partido Popular ha desplegado su verdadera forma de estar en el Gobierno. La mayoría absoluta le ha quitado la careta y todos los problemas que se veían en la anterior legislatura han tomado velocidad de crucero en esta con una agenda que debilita los servicios públicos y se desentiende de las condiciones de vida y de trabajo de la gente. 

Esa manera tan arrogante de desplegar la mayoría absoluta también le está haciendo pensar que disfruta de una comunidad que en realidad no tiene. Ahí están empezando a aflorar líos, y algunos ya son crónicas de tribunales como los contratos del SAS, Inserta y los pisos de tutelados, con la subvención de José Manuel Soto... Temas que al final vienen en el ADN del PP porque tiene una manera de estar en el Gobierno que muchas veces no se compadece ni con el cumplimiento de la ley ni con decirle la verdad a la ciudadanía.

P. ¿Qué espera de este año?

R. Tenemos que seguir intensificando el trabajo para desenmascararles. Hay que aumentar la capacidad que tenemos de explicar a la ciudadanía que se siente concernida por las consecuencias de las malas políticas del Partido Popular donde residen las competencias y donde se toman las decisiones para que los problemas que tiene se solvente. En la mayor parte de los casos es la Junta de Andalucía porque tenemos un nivel de autogobierno muy grande y unas competencias exclusivas muy amplias. Teneos que seguir fiscalizando al Gobierno, pero también poniendo en pie la alternativa que necesita Andalucía para salir de esta situación.

P. ¿Cree que le queda recorrido a la legislatura?

R. A la legislatura le queda mucho recorrido. Un año largo en política es una eternidad. Lo que no parece es que haya sobre la mesa ninguna rectificación porque la Junta se mantiene en sus tesis y, de hecho, niega la mayor. Niegan los datos que ellos mismos nos dan en cuanto a presupuestos, ejecución o inversiones. Niegan las evidencias y siguen manteniendo los bulos y la mentira como una práctica habitual. Eso sigue aumentando la brecha que se está abriendo entre su manera de hacer las cosas y el grado de aceptación de la ciudadanía.

P.  ¿Le ha sorprendido algo del comportamiento del PP con la mayoría absoluta?

R. Ha habido un cambio. No nos ha sorprendido, pero es verdad que hemos lamentado tener razón. En la anterior legislatura la correlación de fuerzas no le permitía al PP desplegar toda su agenda y se revestía con una cierta vocación dialogante. En cuanto ha tenido la mayoría suficiente, todo eso, aunque lo mantiene en el publirreportaje, se ha desbaratado en la acción cotidiana con el resto de grupos y la sociedad.

"La Junta niega las evidencias y sigue manteniendo los bulos y la mentira como práctica habitual"

P. ¿Qué cree que puede hacerle perder al Partido Popular la mayoría absoluta?

R. Nunca hay un único elemento para que se produzca un vuelco electoral. Sin duda esa arrogancia e insistencia en mantener decisiones que son equivocadas y que están siendo refutadas por la ciudadanía porque tienen consecuencias negativas a pie de calle que todo el mundo percibe puede ser la base de esa pérdida de apoyo. 

El PP está abandonando a su suerte a gente que necesita de manera imperiosa que la Junta funcione. Tiene una avería extraordinaria con la gestión del SAS y la política sanitaria, también en la educativa con la falta de personal, sobre todo para atender al alumnado con necesidades especiales. La lista de espera en dependencia son insoportables, el precio de la vivienda está desbocado y se niega a tomar medidas que empiecen a enfriar esos precios que impiden a la gente acceder a una vivienda. La suma de la falta de capacidad de respuesta y del poco reflejo a la hora de ser poroso a la sensibilidad de la sociedad puede contribuir a que haya una pérdida de apoyos.

P. Enumera muchos problemas, no sé si usted le hace caso a las encuestas, pero de momento ninguna refleja ese desgaste. ¿Están ustedes en una cámara de eco en la que sólo escuchan el malestar y no el apoyo que sigue teniendo el PP?

R. Ninguna encuesta dio por presidente de la Junta a Moreno Bonilla. Todas decían que iba a revalidar Susana Díaz. Tampoco que Javier Arenas no iba a ser presidente. No son una ciencia exacta y lo que sí tenemos son las preocupaciones de la ciudadanía. Sanidad, desempleo, vivienda, corrupción... en todos los elementos Moreno Bonilla suspende. 

Aunque no haya traducción demoscópica en intención de voto, sí hay una publicación reciente de retirada de apoyo o de simpatía hacia el PP. Lo primero es que la gente que ya sabe cuáles son los problemas que  le preocupan, identifiquen a la Junta de Andalucía como responsable de que no se resuelvan. 

P. ¿Usted cree que hay cargos del Gobierno de la Junta que van a terminar en los juzgados? 

R. Es más que probable. Hay tres gerentes del Servicio Andaluz de Salud imputados, la última sigue en activo y en su puesto. Está el presidente provincial del Partido Popular en Sevilla también con un lío en tribunales. Han cesado al director de los servicios económicos del SAS. Ahí hay líos, y los hay también en la adjudicación de los contratos de los pisos de chicos y chicas tuteladas con un responsable del observatorio de la infancia que tiene a su mujer y a su hijo trabajando para esa misma empresa. Hay muchos temas, incluido el de José Manuel Soto. Darle una subvención a un amigo porque te mira de no sé qué manera salta ya a la caricatura, pero detrás hay un soporte jurídico robusto en cuanto a las leyes que se han podido saltar para hacer eso. No es descartable.

"Es más que probable que cargos del Gobierno andaluz acaben en los juzgados"

P. Me refiero a consejeros y presidente.

R. Cuando un juzgado empieza a tirar del hilo, mientras que el ovillo tiene, el juzgado sigue tirando. No sé dónde llegará todo. Pero sí es una pena y me parece condenable que no se asuman responsabilidades políticas por parte de nadie a pesar de que los responsables últimos de estas políticas de cada consejería son quienes están ahí y, en última instancia, de Moreno Bonilla. Cuando no los remueve del cargo, asume las decisiones adoptada y se aleja de la ejemplaridad que se le pide a un buen Gobierno.

Le hemos preguntado a Moreno Bonilla por la ética de su Gobierno a la hora de asumir responsabilidades cuando hay personalidades destacadas del partido incursos en procedimientos, o ya bien judiciales, o bien de supuestos casos que pueden ser de corrupción o incluso de abuso sexual y aquí no se mueve nadie. Ahí sigue la alcaldesa de Marbella o el alcalde de Algeciras.

P. En caso de que se vote la quita de la deuda en el Parlamento, ¿espera algún cabio en la postura del PP?

R. No creo que el PP pueda decir otra cosa que no sea no. Se ha metido en un laberinto, aunque está quedando muy al porque nadie lo entiende. Hace 4 meses Moreno Bonilla decía que con 17.000 millones euros estaba satisfecho y ahora con 18.900 dice que no. Más la espantada del Consejo de Política Fiscal y Financiera. Todo les impide asumir que se han equivocado.

P. ¿Cómo puede beneficiar la quita a Andalucía? Porque la Junta defiende que no se puede invertir directamente en servicios públicos y que sólo serviría para endeudarse.

R. La tesis de la Junta es que no es dinero contante, ha llegado a decir que es dinero del Monopoly. Pero en el presupuesto de este año hay condonados más de 800 millones para pagar intereses y 3.400 para pagar la amortización de la deuda. Si el Gobierno asume el 40% de esa deuda, la Junta puede en los próximos ejercicios mantener su nivel de endeudamiento y con el dinero que capta de los mercados resolver muchos de los problemas que ahora no resuelve porque dice que no tiene dinero.

Si la Junta legítimamente tenía dudas sobre los criterios y cómo se va a hacer, no te puedes levantar del Consejo de Política Fiscal y Financiera donde se va a hablar de este tema. No te marchas al dictado de tu secretario general de tu partido haciendo un teatrillo como si fueras adolescente. Te quedas, negocias y peleas una mejora para Andalucía. Luego haces un encuentro bilateral con el Ministerio y pones sobre la mesa lo que consideras que la Junta necesita. Pero la estrategia del partido no tiene nada que ver con el interés general de Andalucía.

P. ¿Qué le pareció la valoración de la Junta sobre la situación del SAS, las listas de espera y la atención en 72 horas?

R. Yo creo que con las citas de las 72 horas nos están tomando por tontos. La sensación de la ciudadanía y la que tiene el personal sanitario camina por un lado y el publirreportaje del PP camina por otro. La única manera de atender bien a una persona que tiene una dolencia es con una cita con su médico con unos tiempos razonables, no con una llamada de un médico que no te conoce y probablemente no sea ni de tu distrito sanitario. La Junta tiene que cumplir el pacto que firmó con los sindicatos.

En las listas de espera me preocupa el triunfalismo y que se den por buenos esos números. A ese ritmo tardaríamos tres décadas en acabar con la lista de espera. Y me preocupa lo caro que nos está saliendo. Desde 2019 se contratan planes de choque derivando a la privada recursos que deberían estar en la pública. Decían que eran para reducir las listas de espera y seis años después aumentan los tiempos de demora y hay 2.000 millones menos.

"Con las citas de las 72 horas nos están tomando por tontos"

R. Yo creo que el PP lo supo antes que ella o que el propio PSOE porque llevaban muchos meses hablando de manera exclusiva de la señora Montero en los debates parlamentarios. El PSOE ha tomado esa decisión y a ver qué evolución tiene y si es ese revulsivo que dicen haber tenido.

P. ¿Espera cambios en el PSOE durante este año?

Habrá que verlo. El PSOE tiene una larga trayectoria en Andalucía con luces y sombras. Después de tantos años gobernando a ver qué parte de las dos historias que ha escrito el Partido Socialista sale reforzada con esta incorporación.

P. La llegada de Montero ha provocado que prácticamente el día a día de la política andaluza se ha convertido en un Junta contra Gobierno. ¿A Andalucía le beneficia eso?

R. Eso sería un poco injusto porque mirando atrás, el grueso del PP al frente de la Junta ha sido estirar el chicle del agravio y esto ya pasaba antes de que la señora Montero fuera elegida en el PSOE. Hay una estrategia de decirle a la ciudadanía que todo lo malo que pasa en Andalucía tiene que ver con el Gobierno de España y lo bueno con Moreno Bonilla. 

En esa simpleza se le van dos días y no se puede achacar a la incorporación de Montero porque esto es desde que empezaron con la herencia recibida, luego la pandemia y después los agravios. No hemos notado cambio, aunque ahora focalizan más y lo circunscriben específicamente a la señora Montero. Echarle la culpa de todo al Gobierno de España es un clásico.

P. ¿Qué le parece que los grupos parlamentarios queden eclipsados con el cambio en el día de los Consejos de Gobierno?

R. El ninguneo del Parlamento está siendo cotidiano. Las consejeras y consejeros cambian de agenda, se marchan los días que tienen que comparecer... A este pleno, por primera vez desde no sabemos cuando, van a venir todos los consejeros. Siempre falta alguno. El ninguneo al Parlamento, no darnos la información es algo que ocurre siempre, pero la responsabilidad es del presidente del Parlamento que debería separar su condición de miembro del PP de su condición de Presidente y no permitir al Gobierno jugar con el calendario de sesiones a su antojo. Lo de las comparecencias es casi anecdótico comparado con las trabajas que procuran ponernos todos los días a la oposición.

P. Su grupo es muy heterogéneo. De hecho usted lo dirige sin que su partido tenga mayoría en la coalición. ¿Está siendo más fácil de lo que hubiera previsto con todo el lío del inicio?

R. Está siendo fácil, pero no tiene que ver con mi aportación. Todo el mundo tiene claro que lo importante es lo que le preocupa a la gente. Estamos volcados en eso y facilita tremendamente la labor. Hay buena disposición al trabajo por parte de los diputados y de las organizaciones y llegamos a muchos temas con un nivel de solvencia y seriedad importante. No nos distraemos en cosas que no nos llevan a ninguna parte. En lo fundamental estamos de acuerdo y facilita las cosas.

"Estamos más cerca de contagiar nuestra manera colaborativa de trabajar que de intoxicarnos con los malos rollos"

P. Pero aislarse del ruido que llega de la política nacional es imposible.

R. Creo que estamos más cerca de contagiar de nuestra manera colaborativa de trabajar al resto del país que de intoxicarnos con los malos rollos que vienen de fuera. Es un mérito colectivo. No es que estemos en una campana de aislamiento, es que hay mucha faena que hacer y eso es lo importante. Aspiramos a ser una referencia inspiradora para el resto de las organizaciones que trabajan en espacios diferentes.

P. Apenas queda un año para las elecciones. ¿Cómo va el tema de la unidad y el candidato? ¿Les va a volver a pillar el toro?

R. En el ámbito del grupo parlamentario trabajamos la oposición al Gobierno de Juanma Moreno, las políticas del PP y plantear alternativas que nacen de nuestro espacio político y vienen de la mano de la sociedad. El grupo nos tenemos que dedicar a fiscalizar la labor que hacen, impugnar las que le hacen daño a la gente y poner enfrente una alternativa potente y solvente.

Las organizaciones de la coalición claro que están trabajando ya. Todo el mundo aprendió de no dejarlo todo para última hora y tan pronto todas esas decisiones y esos cambios de la nueva etapa estén concluidos, tendrán su traducción para la estrategia de trabajo que haya que hacer en el nuevo ciclo electoral.

P. ¿Se espera unas andaluzas coincidiendo con las generales?

R. No me atrevo a hacer un vaticinio con lo que se le puede ocurrir hacer a este hombre.

P. ¿A quién?

R. A Pedro Sánchez, es un hombre muy creativo.

P. Lleva tres legislaturas. Está cumpliendo una excepción dentro de lo que permite su formación. ¿Es su último año como diputada en el Parlamento de Andalucía?

R. Es lo que toca abordar en el ámbito de las organizaciones. Las coyunturas políticas a veces te hacen tener tomar decisiones que no eran las que tenías previstas, pero bueno, si es una nueva etapa, lo normal es que haya cambio y este es uno de los que está encima de la mesa. Que lo materialicemos o no será fruto de esos acuerdos que tengamos entre las organizaciones. En política lo importante es lo colectivo y toda la gente que está trabajando junta son hombres y mujeres excelentes que pueden afrontar esa nueva etapa a las mil maravillas.

P. No sé si he entendido mal. Pero usted no cierra la puerta a otra legislatura.

R. No me he sentado todavía. La experiencia, y sobre todo la de 2022, me ha enseñado que lo imponderable en política a veces desarma tu opinión personal o tu apetencia personal. No me quiero extender en eso porque mi papel es separar lo que yo tengo encomendado para que el grupo parlamentario funcione y que la gente trabaja bien. No debo deslizarme en hacer valoraciones o anuncios que puedan estorbar al trabajo que están haciendo las direcciones de las organizaciones políticas.