A la tercera, ¿va la vencida?
Raúl Ruiz Berdejo (Jerez, 1978) comenzó su andadura en la primera línea política hace casi una década. Concurrió como cabeza de cartel de la marca Izquierda Unida en 2015, en plena ola del cambio y de la irrupción de Podemos y sus ‘marcas blancas’ de aquellas municipales, caso de Ganemos, y logró retener 2 de los 3 concejales que hasta ese momento, gracias al infatigable trabajo de Joaquín del Valle, supuso el récord de la coalición de izquierdas en el pleno de Jerez.
Cuatro años después, bajo el paraguas de Adelante Andalucía, también lideró la candidatura, pero se lograron tres ediles, en un declive que finalmente acabó reflejándose en un grupo municipal desfigurado y con numerosas desavenencias.
Ahora, tras meses de negociaciones por un frente amplio de izquierdas en la ciudad, IU ha decidido, en su asamblea local celebrada el pasado sábado, apearse de esta posibilidad y volver a su propia senda. De nuevo, Ruiz-Berdejo, el hombre de La Milagrosa que lleva tres años retándose a sí mismo para rebajar casi 50 kilos, ve totalmente factible recuperar aquella marca de tres ediles para IU que dejó el camarada Del Valle. Hay algo más de tres meses, así las cosas, para quitarle la razón a quienes aseguran que la fragmentación del voto de la izquierda es un suicidio político que solo da a alas a la derecha en la ciudad.
No lo diría yo exactamente así. Sí es cierto que tenemos unas elecciones dentro de tres meses y que nos preocupaba mucho el no salir de un bucle en el que nos manteníamos instalados en las conversaciones con el resto de actores. Nosotros siempre hemos pensado, y seguimos pensando, que lo deseable hubiera sido alcanzar un acuerdo y acudir juntos a las elecciones municipales. Porque esa es la vocación de esta organización política, el intentar sumar, pero si las posiciones son todos los rígidas que han demostrado ser hasta el momento, y no existen puntos de encuentro, ni parece factible a corto plazo un acuerdo, creo que lo que toca por responsabilidad es empezar a desplegar la campaña y, desde luego, poner rumbo a las elecciones municipales.
Izquierda Unida nace con la vocación de sumar a diferentes actores y lo hemos intentado; y de hecho, venimos de un mandato en el que hemos confluido con otros actores y la experiencia no ha sido buena. Nosotros no hablamos solo de defender el peso histórico de Izquierda Unida, hablamos de defender, o de respetar mejor dicho, el espacio que tiene cada proyecto político en esta ciudad.
"Una confluencia tiene que partir del respeto a lo que cada uno es y del respeto a lo que cada proyecto aporta"
Nosotros no somos lo que somos sólo por la herencia y la tradición, y el trabajo de tantos compañeros y tantas compañeras a lo largo de tantos años, somos lo que somos porque los hombres y las mujeres de Izquierda Unida están todos los días fajándose en la calle, en los diferentes espacios y en las instituciones. Aportando, construyendo, movilizando, y eso es lo que estamos intentando que se reconozca y que se ponga en valor en esa coalición. Porque si no, no vamos a sentirnos debidamente representados y creemos que una confluencia tiene que partir del respeto a lo que cada uno es y del respeto a lo que cada proyecto aporta. De lo contrario, está condenada, por desgracia, o puede estar condenada, a salir mal. Y eso es lo que nosotros no queremos.
Bueno, a ver, nosotros entendemos que estas semanas han sido de mucha tensión. Entendemos que todos los actores, todos, estábamos por la labor de alcanzar acuerdos. El entendimiento no ha sido posible y nosotros podemos entender que esos comunicados formen parte también de ese contexto de tensión ante una situación que es especialmente compleja. Sí es cierto que pensamos que, teniendo una asamblea a unos días vista, intentar por medio de comunicados condicionarnos, no nos ha parecido la mejor manera de intentar reconducir la situación. Hemos tenido oportunidad de sentarnos muchas veces, de decirnos las cosas que creíamos que nos teníamos que decir y, bueno, esa posibilidad siempre está abierta. Nosotros nunca hemos cerrado la puerta a sentarnos con los demás. De hecho, cada uno de los actores sabe cuál es la posición de Izquierda Unida porque nos hemos mantenido firmes y siempre hemos defendido lo mismo, desde el principio de las conversaciones hasta el final de las mismas.
Evidentemente ha influido. Nosotros partimos de una experiencia muy negativa. Nosotros compartimos una confluencia en la que fuimos en minoría, que eso no lo recuerda nadie, pero entonces Podemos hizo valer su peso. En aquel momento, fundamentalmente por su peso electoral, y tuvo mayoría en ese grupo municipal; y nosotros no tuvimos ningún problema en respetarlo. Igual que no hemos tenido ningún problema en acudir, junto a otras organizaciones, ocupando un espacio inferior al de esas organizaciones, en distintas confluencias, la última Por Andalucía. Pero podemos remontarnos a experiencias como las de Adelante o incluso la de Unidas Podemos. Y hemos sido completamente generosos porque hemos entendido la situación. Eso es lo que estamos poniendo ahora encima de la mesa. El contexto en Jerez es otro y nosotros pedimos que ahora se respete eso.
"Es más complejo que hablar de sillones; el espacio se ocupa desde la responsabilidad y desde el compromiso para dejarse el alma en los problemas de los jerezanos"
A partir de ahí, respondiendo a tu pregunta, la experiencia durante este mandato no ha sido buena. Formamos un grupo municipal con dos personas que representaban a Podemos. Una de las dos acabó, como no adscrito, por un ejercicio de transfuguismo. Y la segunda, entendemos que también ha estado adoptando posiciones cuando menos discutibles durante el mandato. Y nosotros no estamos hablando de ocupar sillones. Estamos hablando de que el espacio de las instituciones se ocupa desde la responsabilidad y desde el compromiso para vaciarse y para dejarse el alma en las respuestas a los problemas de los jerezanos. Por eso, porque podemos exigir eso, porque nosotros hemos predicado con el ejemplo, es por lo que queremos garantizar que el grupo que salga a la izquierda del PSOE el 28 de mayo sea un grupo capaz y, sobre todo, un grupo comprometido y dispuesto a vaciarse y a dejarse el alma para dar respuesta a los problemas de esta ciudad. Todo lo contrario sería un ejercicio de enorme irresponsabilidad por nuestra parte.
"Hemos estado formando un grupo municipal con una organización (por Podemos) que ha votado un presupuesto municipal en dirección contraria a la nuestra"
Yo no voy a perder ni un minuto en desmontar el relato que otros puedan querer construir. A IU la conoce aquí todo el mundo, porque nosotros no somos sospechosos, porque llevamos muchos años en las instituciones y siendo parte importante de la movilización y del trabajo en las instituciones. Nuestra vocación siempre ha sido sumar. Cuando decimos que acudiremos a unas elecciones rodeados y acompañados de gente de diferentes comités de empresa, de colectivos, de asociaciones…, lo decimos porque sabemos el trabajo que tenemos desarrollado y sabemos las alianzas que tenemos con la sociedad civil jerezana. A partir de ahí, ¿que esto se puede acabar convirtiendo en una disputa por el relato? No vamos a perder ni un segundo en eso. Estamos aquí para hacer política. Somos gente seria. Queremos trabajar en dar respuesta a los problemas de los jerezanos y esos juegos, para nosotros, más que política son politiqueo. El verdadero objetivo no es otro que empezar a trabajar para corregir los problemas que tiene esta ciudad.
Vamos a ver, partimos de que los programas electorales van a ser coincidentes en un alto grado, pero lo que ocurre es que no solo estamos hablando de programas, también estamos hablando de cómo se usa el espacio de las instituciones y de cómo se percibe y cómo se ejecuta el ejercicio de la política. Y esto encaja con lo que te decía antes. Hemos acudido a las pasadas elecciones municipales en una confluencia, hemos sacado tres concejales y podemos mirar en qué medida se ha traducido el trabajo del concejal de Izquierda Unida, el espacio que nosotros teníamos, y qué resultado han dado los otros dos concejales. ¿Por qué? Porque entendemos la política desde el ejercicio del compromiso y la responsabilidad. Y eso es lo que nosotros no hemos percibido; porque aquí, más allá del programa, después hay otras cuestiones, que es el compromiso. Hemos estado formando un grupo municipal con una organización política (por Podemos) que ha votado un presupuesto municipal en dirección contraria a la nuestra. Y eso son cosas que están ahí y son cosas que dificultan que podamos ponernos de acuerdo. ¿Podemos coincidir en el programa? Pues probablemente, pero después tenemos que coincidir en el día a día. Y coincidir en el día a día en un Ayuntamiento de una ciudad como esta supone estar todos los días, desde que uno se despierta hasta que se acuesta, intentando vaciarse para responder a la confianza que le ha dado la gente. Eso es lo que nosotros ponemos encima de la mesa y pensamos que no todo el mundo lo pone en la misma medida.
No todo el mundo lo pone en la misma medida. Es más complejo que hablar de puestos o de recursos. Es mucho más complejo que eso. Estamos hablando de la confluencia que pudiera salir después del 28 de mayo. ¿Para qué va a salir en esta ciudad? ¿Va a salir para trabajar con los jerezanos, para vaciarse, para comprometerse, para que cada comité de empresa, cuando tenga un problema, sepa que ahí estamos nosotros, a su lado? Entonces, vamos, no habría ningún problema. Pero si lo que va a salir es una confluencia simplemente para arrancar un puñado de votos más en unas elecciones… entonces nos estamos haciendo trampas al solitario.
Esa es una posibilidad. Nosotros, desde luego, pondremos de nuestra parte para obtener el máximo respaldo de los jerezanos y de las jerezanas. Y también hemos puesto de nuestra parte para intentar alcanzar un acuerdo. Eso mismo que hoy puede estar pensando cualquiera lo pensábamos nosotros cuando en 2015 surgieron Podemos o Ganemos, que vinieron a ocupar un espacio en el que estábamos nosotros. ¿Dijimos algo en ese sentido? No. Porque entendíamos que la diversidad de opciones podía ser algo enriquecedor y que todo el mundo tenía derecho a defender un proyecto político. Lo tenía Podemos, tanto como lo tenía Ganemos. Y entonces nadie, nadie se preocupó de que esa dispersión del voto pudiera provocar un gobierno de la derecha.
En 2019 tuvimos la oportunidad de formar una candidatura también con los tres actores, y en este caso fue Ganemos quien rehusó esa posibilidad. En aquel momento también se estaba poniendo en riesgo el gobierno de izquierda en esta ciudad. Quiero decir, ese es el riesgo. Existe y va a existir siempre, en la medida en que hay diferentes organizaciones políticas en un mismo espacio. Pero a partir de ahí, entiendo que todas están en su perfecto derecho de defender su posición y que sean los jerezanos quienes decidan.
Eso tiene varias respuestas. En primer lugar, creo que esta persona, que todavía hoy es concejal del Ayuntamiento de Jerez, a lo mejor en vez de poner tantos tuits debería acudir a los plenos, por lo menos. Por lo menos. Y después, por otra parte, con respecto a si nuestro propósito es gobernar con el gobierno de Mamen Sánchez, nuestro propósito es gobernar esta ciudad; porque creemos que como se transforman las cosas es desde el ejercicio del gobierno. Y desde luego, tenemos una muy buena experiencia porque hemos conseguido transformar y ejecutar políticas desde la oposición, pero estamos convencidos de que eso hubiera podido hacerse de mejor manera, y dando respuesta a muchos más problemas, si hubiéramos estado en el gobierno.
"No tengo ningún problema en reconocer que tenemos vocación de gobierno; si los números nos dan, queremos gobernar"
Como respuesta a ese tuit, yo sí. No tengo ningún problema en reconocer que tenemos vocación de gobierno. Nos presentamos a estas elecciones para gobernar, y nos gustaría ganar las elecciones y tener la Alcaldía de Jerez. Pero en el supuesto de que no fuera así, si los números nos dan, queremos gobernar. No lo hemos ocultado nunca. No pudimos hacerlo en 2015 porque en aquel momento Ganemos era imprescindible, tenía cinco concejales, para que pudiéramos acumular fuerza y sumar a un gobierno del PSOE. Y en 2019, porque nuestro socio, entonces Podemos, tampoco lo entendía y no era algo a valorar que pudiera implosionar ese grupo municipal cuando apenas estaba empezando a andar la confluencia. Pero sí, Izquierda Unida tiene vocación de gobierno y se presenta a estas elecciones porque quiere gobernar y transformar esta ciudad.
Tenemos miles de ejemplos que lo demuestran, hoy mismo se ha subido el Salario Mínimo Profesional (SMI), pero también tenemos las políticas en materia de vivienda, el escudo de protección social, los ERTE, etcétera. Pues claro que influye, y claro que podemos ser importantes, y por eso creemos que en Jerez se han perdido dos oportunidades fantásticas de haber podido aplicar nuestras políticas desde dentro. En la medida de nuestras posibilidades hemos estado aplicándolas desde fuera, porque por fortuna el diálogo ha sido más o menos fluido, y también hemos sabido aprovechar el espacio que teníamos en la institución: hemos peatonalizado, hemos municipalizado servicios públicos, hemos llevado a cabo iniciativas en el ámbito de la cultura… Vamos a inaugurar pronto un memorial por las víctimas del franquismo, vamos a poder poner en marcha una oficina contra la pobreza energética… Son solo algunos ejemplos. Todo lo que hemos hecho con un solo concejal de tres en la Corporación, si hubiéramos tenido oportunidad de gobernar, se hubiera multiplicado por tres o por cuatro. Por eso creemos que es imprescindible intentar aprovechar los espacios que podamos conquistar en las instituciones para aplicar políticas para la gente.
No hemos cerrado ningún capítulo. Lo que sí hemos dejado claro, y así nos lo ha dicho nuestra asamblea, es que quedan tres meses para unas elecciones municipales y que aquí no podemos estar mareando la perdiz; porque si seguimos haciéndolo vamos a llegar al 29 de mayo hablando de confluencia y entonces las elecciones municipales nos habrán pasado por encima. Creemos que tenemos una responsabilidad con esta ciudad y eso significa que tenemos que empezar a trabajar ya para conseguir que el 29 de mayo tengamos un gobierno de izquierdas en Jerez. ¿Significa esto que el capítulo de la confluencia está cerrado? No, significa que los diferentes actores saben cuál es nuestra posición y la postura de ambos les impide alcanzar acuerdos con nosotros. Nosotros no podemos seguir mareando la perdiz porque esto causaría un daño irreparable a la izquierda de esta ciudad. Entonces, la puerta sigue abierta, pero nosotros en paralelo tenemos que trabajar; porque de lo contrario sí que va a existir un riesgo real de que gobierne la derecha en esta ciudad.
Bueno, pues tenemos, en ese sentido, trabajo, y tenemos trabajo hecho. No solo tenemos los cuadros de hombres y mujeres de IU que han estado trabajando estos años, comprometidos y activos políticamente, sino que también contamos con alianzas que vamos a poner encima de la mesa. Creemos que eso también es una confluencia, contar con el respaldo de gente significativa de comités de empresa, como el de las teleoperadoras, la ayuda a domicilio, la limpieza, la recogida de basura, la vid, los taxistas…, estamos hablando, al fin y al cabo, de contar con la sociedad civil. ¿Por qué regla de tres iba a ser eso menos confluencia que el hecho de que nos podamos sentar tres partidos y alcanzar un acuerdo? Si realmente nosotros hemos estado trabajando todos los días por esta confluencia, por la confluencia con la calle, con la clase trabajadora de esta ciudad, que cada vez que ha tenido un problema, y ha mirado a su izquierda, siempre hemos estado nosotros. Siempre. Pero es que esa alianza ha sido natural porque la hemos trabajado durante durante muchos años. Con eso también llega Izquierda Unida a una confluencia. Eso es lo que aporta IU, no sólo la tradición política, que también, y de la que nos sentimos muy orgullosos, sino también la alianza con la sociedad y con la clase trabajadora de esta ciudad. Esa es nuestra confluencia.
Nosotros creemos que este gobierno ha hecho cosas bien y desde luego no vamos a ser nosotros quienes las discutamos.
"Nuestra mayor satisfacción es saber que no hemos perdido el tiempo en estos cuatro años"
Creemos que se han dado pasos como nunca antes se habían dado, al menos en el medio plazo, en el sentido de la recuperación de intramuros. Se han hecho cosas importantes y se está avanzando. Creemos que hay peligro futuro en la proliferación de los apartamentos turísticos y es un problema que vamos a tener en el medio plazo, por lo que haríamos bien desde ya en acotar esos problemas. Por otra parte, creemos que ha faltado ambición. Jerez necesita más liderazgo y políticas audaces que nos permitan cambiar el modelo productivo, y no persistir en que, aunque sea muy positivo que esta ciudad crezca desde la perspectiva turística y comercial, el municipio sea rehén de, exclusivamente, ese sector. Tenemos que tener una diversidad. ¿Por qué? Porque, de lo contrario, el empleo que se genera en esta ciudad es un empleo solo del sector servicios. En la mayoría de los casos, la hostelería crea un empleo precario, estacional…, Jerez tiene un sector industrial famélico y creemos que se necesita una apuesta contundente, una apuesta política para empezar a equilibrar el modelo productivo. Y en este sentido, nos falta mejorar y recuperar el sector industrial. Ahí creemos que no se ha hecho lo suficiente y creemos que sigue siendo una asignatura pendiente.
Esa es la clave. Tenemos un plan de desarrollo rural, hemos conseguido dar pasos, pero sigue siendo mucho lo que queda por hacer en el Jerez rural. Estamos hablando de que un 10% de la población se encuentra repartida entre las ELA, barriadas rurales, y la pedanía de Cuartillos, y en la mayoría de los casos esos jerezanos y jerezanas se sienten ciudadanos de segunda porque no perciben que la prestación de los servicios públicos les llegue en las mismas condiciones.
Bueno, es algo de lo que nos sentimos muy, muy orgullosos. Ha sido un trabajo duro. Cuando nosotros hablábamos de aquello nos decían que estábamos locos, que aquello era imposible. Pero lo conseguimos. Cuartillos ya es una pedanía. Hace algunas semanas celebramos su primera junta vecinal y no nos quedaremos ahí.
En todo caso, nuestra mayor satisfacción es saber que no hemos perdido el tiempo en estos cuatro años. Por eso yo invito a que ojalá pudiera remediarse que vayamos con papeletas diferentes las fuerzas de izquierda a las elecciones municipales; pero si no fuera posible, a cualquier ciudadano le pediría que escribiera una lista de todas las iniciativas que han puesto en marcha cada uno de los actores, y sobre todo, dónde ha estado y hasta qué punto se ha implicado cada uno de los actores. Sin ánimo de de menospreciar el trabajo que ha desarrollado cada uno, nosotros nos sentimos muy orgullosos de lo que ha desarrollado Izquierda Unida. Y desde luego, particularmente en lo personal, me siento orgulloso del trabajo, de la implicación, de cada hombre y cada mujer de esta organización, porque sé hasta qué punto se han dejado todos los días el alma. Por eso entiendo que es imprescindible reivindicar el espacio que este proyecto político tiene en la ciudad. Pero no solo por el bien, o por la defensa propia del proyecto, sino por la propia ciudad en sí. Creo que esta ciudad necesita una organización política de izquierda como Izquierda Unida.
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