Una trayectoria de menos a mucho más
José Antonio Lucero (Rota, 1988) fue premiado en 2022 como uno de los mejores docentes de España. Usa con sus alumnos el método de la clase invertida, en el que reciben la clase por Youtube y hacen la tarea en clase. Es profesor de Geografía e Historia y Lengua y Literatura en el IES Nuestra Señora del Perpetuo Socorro de Rota y cuenta con el exitoso canal de youtube La cuna de Halicarnaso, que usa como base para aplicar en el día a día de sus clases un modelo pedagógico que busca motivar a sus alumnos y hacer de su aprendizaje algo muy especial.
En paralelo a su carrera pedagógica ha desarrollado otra como escritor. En 2012 se autopublicó su primera novela, Mariela, 1972. Un asesinato en Rota y después han ido llegando otras debido a la buena aceptación en el mercado literario. Con La vida en un minuto y La Madrina de Guerra se asentó en el mundillo editorial y está viviendo su despegue definitivo con La maestra, novela lanzada en este 2024.
Va muy bien. De las novelas que he publicado, este lanzamiento ha sido el mejor. Ha salido ya la tercera edición en menos de dos meses. Y de crítica está resultando muy satisfactoria, así que estoy súper contento porque está yendo genial.
Sí, de hecho es una novela que tanto por extensión como por estilo de escritura, es perfecta para lectura de verano. Sobre todo para aquellas personas enamoradas o vinculadas de alguna manera a la docencia. A cualquier persona que tiene el recuerdo de un buen maestro le va a encantar la novela porque trata sobre una parte de la historia del magisterio en España, que es aquella relacionada con la Guerra civil, el franquismo y la Segunda República.
Tiene como protagonista una maestra, que es una maestra ficticia, pero basada en muchas maestras cuya historia he leído y documentado, que justo antes de iniciarse la Guerra Civil empieza a dar clases en un pueblo de la Sierra de Cádiz y tiene que enfrentarse a la situación de la guerra en su clase, con sus alumnos, con un pueblo que de pronto se ve dividido y arrastrado a la dinámica de la guerra. Y luego esta maestra, por circunstancias que el lector va encontrando, será depurada del magisterio y no tendrá las herramientas para volver a dar clase hasta muchos años después, incluso décadas, cuando volvieron a dar clase tantos maestros depurados durante el franquismo.
La importancia de que la docencia tiene que ser vocacional y de cómo la vocación puede sobrevivir a pesar de la de situaciones terribles que han vivido los maestros en España. Muchos de ellos se jugaron la vida y muchos la perdieron por el simple hecho de dar clase de una determinada forma, que no tenía nada que ver con política sino simplemente con determinadas prácticas en el aula que no estaban bien vistas.
Con la evolución lógica. Intento que cada vez el lector se atrape más, se interese más y se emocione más. Y creo que lo he conseguido porque me están diciendo muchos lectores que esta novela, a pesar de que las demás les gustaron, es la que más. Detrás hay un proceso de documentación para llegar a testimonios de antiguos alumnos y familiares de maestros.
Siempre digo que yo no me puedo quejar, lógicamente. Los meses de julio y agosto son los que utilizo para escribir. No obstante, yo creo que los maestros hacemos un gran labor que mucha gente no ve. Piensan que trabajamos cinco horas de clase cada día y no es cierto. Hay muchas horas que están ahí detrás y no se sabe. Trabajamos mucho más de lo que dicen.
Sí, en mi clase sigo utilizando mis vídeos de YouTube. Es cierto que ya no publico con la misma asiduidad de antes porque tengo ya muchos vídeos que ya utilizo de manera recurrente. Voy a rehacer vídeos que considero que merecen una revisión. Ya tengo ese banco de recursos que siguen utilizando miles y miles de docentes. El canal sigue teniendo durante el curso una media de medio millón de visitas mensuales. Eso significa que todavía me siguen usando esos recursos de manera gratuita un montón de docentes. Me gusta que los alumnos sepan vivir en el mundo digital, sepan aprender en Internet y tengan una capacidad crítica de encontrar lo que les conviene y lo que no.
Yo recomiendo desconexión. Yo no recomiendo ningún trabajo académico, salvo algún caso de algún alumno que lo necesite. Los chavales, al igual que cualquier persona, se merecen un periodo vacacional, un periodo de desconexión y lo que yo recomiendo siempre es la lectura. La lectura mantiene activo el cerebro de un alumno o de cualquier persona, es una herramienta maravillosa. La mejor manera de que el cerebro siga aprendiendo es con la lectura.
Creo que Rota es uno de los sitios donde se está gestionando de manera óptima. Vivimos un momento donde hay muchos visitantes, pero Rota tiene una gran extensión de playa y hay distintas opciones para ofrecer a la gente. Yo todavía no he notado esa gran masificación que sí que hay en otros lugares. Es un pueblo que durante muchos años ha convivido con el turismo de manera natural. En muchos pueblos la salida laboral más allá del turismo es muy difícil y debería haber más oportunidades de otro tipo de trabajo para la gente joven, sobre todo para que no tengan que vivir de un trabajo estacional.