Tablada, el sueño del pelotazo urbanístico en zona inundable que el alcalde de Sevilla aún no descarta

El autor del PGOU vigente, un investigador universitario y el portavoz del colectivo por un parque periurbano explican a lavozdelsur.es la historia de este espacio, una llanura aluvial cuyos dueños aún sueñan con una recalificación que permita miles de viviendas de lujo

La dehesa de Tablada, con Sevilla al fondo, vista desde San Juan.

Las trágicas inundaciones de Valencia han costado, por el momento, más de 200 vidas, y miles de millones de euros arrasados en infraestructuras públicas y bienes personales. Desde vehículos hasta casas destrozadas, negocios arruinados... Quizás, la mayor tragedia de la generación actual en España. En Sevilla, existe desde hace años un debate sobre la situación de los terrenos de Tablada. El alcalde, José Luis Sanz, ha matizado y rematizado hasta cuatro veces sobre qué hacer con este terreno, ubicado al sur de la ciudad. El problema es que es inundable.

En concreto, una llanura aluvial. Hay textos desde el siglo XVI que hablan de inundaciones en Tablada. La razón es simple: cuando el río viene crecido, tras pasar Triana y Los Remedios, esta zona seca queda invadida de agua. Tiene una utilidad: logra detener las riadas al reducir la fuerza del agua. Más aun con las obras que han ido elevando las defensas que evitan que Sevilla, Coria o San Juan de Aznalfarache se inunden. 

"Los terrenos de Tablada están fuera del muro de defensa"

A la altura de Tablada está Gelves, construído junto al Guadalquivir. El problema de construir es que, si se elevara la defensa en Tablada, el río desbordaría cuando se acumularan lluvias en zonas urbanas de estas localidades. Y no puede construirse, para compensar, un muro de defensa con cota superior en estas localidades, porque entonces se arrastraría el problema hasta las siguientes localidades. En este caso, Coria y, a continuación, La Puebla. Además, elevando la fuerza de las aguas.

En Tablada se situaba el aeropuerto militar, cuya pista aún está. Eso marcó su actividad en el siglo XX. Pero en 1998, el Ministerio de Defensa subastó los terrenos, siendo adquiridos por dos cajas, la Caja San Fernando y El Monte. Fueron unos 5.000 millones de pesetas. En una tribuna de opinión aquel año en El País, la que era catedrática de Geografía Humana de la Universidad de Sevilla y posteriormente consejera de la Junta, Josefina Cruz Villalón, alertaba del riesgo de urbanizar estos terrenos. "La decisión de alterar la condición de inundables de estos terrenos, junto al coste económico, tiene una incidencia ambiental e hidráulica sobre la que deberán pronunciarse en su día tanto la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), como Medio Ambiente, así como los municipios situados aguas abajo de Tablada, en la medida en que no les serán ajenas las repercusiones que la protección de Tablada pueda tener en su propio territorio y, sobre todo, en sus núcleos de población", decía.

Una imagen de la zona inundada en los años 40.

Entonces, en la ciudad se generó un ambiente de presión. Pero las cajas fueron avisadas por el Banco de España de que la especulación inmobiliaria no estaba entre sus fines. Finalmente, acabaron vendiendo los terrenos a un grupo de empresarios de la construcción. Empezaba la batalla por modificar el PGOU, el plan que permitiría que Tablada pasara a ser de un terreno eminentemente rústico a una urbanización de ladrillos por medio de la recalificación. Eran los años en que se fraguaba el esquema del pelotazo urbanístico, cuando tantos se hicieron archimillonarios.

Las presiones para permitir construir llegaban de todas partes. Conferencias, reuniones... nadie en Sevilla era ajeno. Tampoco Manuel Ángel González Fustegueras, el arquitecto que dirigió aquel PGOU. Fue aprobado en 2006 y por este documento ganó el premio de la Asociación Española de Técnicos Urbanistas, en el marco de los Premios Europeos de Urbanismo. En una entrevista con lavozdelsur.es, recuerda cómo Sevilla ha estado históricamente condicionada por sus ríos, tantas veces modificados por la mano del hombre. "Los terrenos de Tablada están fuera del muro de defensa. Y es física, si se quitan 300 hectáreas de inundación, el agua invadiría más suelos y con más cota. Su posición en la ordenación de Sevilla tiene las condiciones para ser el área central de un gran parque inundable. Para retener inundaciones, pero también para absorber CO2".

Los terrenos pasaron de Defensa a las cajas sevillanas, y estas la vendieron a un conglomerado de empresarios

Fustegueras insiste en que es la ciencia la que advierte de que Tablada "no es solo inundable, es altamente inundable. Más tarde o más temprano, pero es física". Por eso, "no creo que nadie sea tan loco como para poner suelos residenciales. Cuando no hay llanura de inundación, como hemos visto en Valencia, pero también el lunes en Almería, el agua va más rápida y arrolla más". 

El cálculo es que Tablada se inunda cada 100 años. Las personas de más de 60 ó 70 años lo han visto. Se tienen que dar varias condiciones. Por ejemplo, que los embalses estén llenos previamente, algo que ocurre cuando se acumulan lluvias y no ha dado tiempo a ir desembalsando. Dependiendo de la época del año, el Guadalquivir puede llevar más agua por los deshielos del río Genil, que nace en Sierra Nevada y desemboca en Palma del Río. Deben, además, acumularse lluvias importantes en un periodo corto. Condiciones que en Valencia se dan cada 500 años (el llamado t=500, sobre frecuencia de fenómenos meteorológicos) se dieron hace dos semanas. Las de Sevilla, para inundar Tablada, se dan en menos tiempo, 100 años.

Viviendas en San Juan Bajo, al otro lado del río.  MAURI BUHIGAS

Cuando estaba elaborando el PGOU, el profesor de la Universidad de Sevilla Fernando Sancho Royo recibió una llamada. "Fustegueras tenía un documento de la Confederación Hidrográfica, sin firma pero con membrete, que abría la posibilidad de que Tablada no se inundara. Contactó conmigo como profesor de Ecología para preguntarme, y le dije que el documento, seguramente elaborado por ingenieros, tenía muchos defectos, que era confuso. Me pidió que lo respondiera por escrito". 

De aquella respuesta acabó, junto a la colaboración de colegas y de los propios alumnos de la Facultad de Biología de la Universidad de Sevilla, un documento de más de 300 páginas repasando las condiciones de Tablada. El resultado de una petición expresa y posterior de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía. La conclusión es que Tablada debía quedarse fuera del PGOU, y así se hizo. 

"Es una llanura de inundación", recuerda. "El Guadalquivir tiene una capacidad de embalse brutal y está muy regulado. Yo he visto Tablada inundado, como cualquier sevillano mayor de 60 años, como lo recuerdan en Coria. Es infrecuente, pero es que el cambio climático provoca que las lluvias sean más torrenciales". Por un lado, es cierto que de media cada vez llueve menos. A mediados del siglo XX, unos 570 anuales. Actualmente, menos de 500. "Pero lo importante es que llueve más concentrado". Tampoco se dan las mismas condiciones que en Valencia, con un Mediterráneo más cálido que creó las condiciones, en un terreno también diferente al de Sevilla. Y con todo, "para nosotros, no hay duda de que Tablada se inundará. No sabemos cuándo, pero se inundará. La certeza es clara".

Basta con que el río alcance unos 6.000 metros cúbicos por segundo. Si se estrecha el cauce urbanizando Tablada, la física hace lo suyo y empeora la situación. "Si se construye una defensa, Gelves, por ejemplo, podría pasar de inundarse 20 centímetros a 40 ó 60", calcula, "porque el agua buscará la orilla que está al frente, o lo hará cauce abajo".  Para Sancho Royo, "construir sería "un error dramático, porque en Valencia hemos visto las orejas al lobo y puede pasar aquí. Son vidas, patrimonio, derechos". Y rechaza la última de las afirmaciones del alcalde, lo de que no todo sea inundable. "El terreno oscila, desde los 9 metros en la parte norte hasta puntos a 5 ó 6 metros. Esos se inundarán antes que el de nueve, pero todo es inundable". Como investigador del río, cree que Tablada ha sido despreciada en la cultura sevillana. Piensa en actividades relacionadas con la historia de la aviación, un museo aeronáutico. Pero, sobre todo, un parque, o metropolitano o periurbano. 

La vista de Tablada, suelo rústico en el Sur de Sevilla.  MAURI BUHIGAS

Es también la propuesta de Mesa por Tablada, una plataforma que reúne a unas 40 asociaciones, desde ambientales hasta vecinales, que quieren ver la dehesa como una zona verde, un pulmón para la ciudad. Enrique Hernández es, además de uno de los portavoces, doctor en Geografía y docente de la universidad de Sevilla. "Con este alcalde hemos retrocedido 25 años", lamenta. El PGOU ha intentado ser tumbado en varias instancias judiciales. El Supremo, finalmente, ratificó que Tablada es inundable y que, por tanto, quedaba fuera de la ordenación urbanística. Las pretensiones del pool de propietarios, constructoras e inmobiliarias, no veía fructificar.

De hecho, también han intentado recientemente ser compensados por la compra de los terrenos. Y de nuevo se han llevado el chasco judicial y esa vía se agota. "Quedan o la expropiación o la negociación con los propietarios", subraya Hernández. Lo más sencillo, lo segundo, realizar un desembolso para que el terreno pase de nuevo a manos públicas. La Mesa, para ello, se ha reunido con los dos últimos alcaldes socialistas, Juan Espadas y Antonio Muñoz. "Conseguimos pequeñas victorias, como un informe del secretario favorable a la compra". Con el actual alcalde no se han reunido y han recogido más de 30.000 firmas que quieren entregarle en persona, "pero no nos recibe".

"¿Cómo alguien osa poner en duda que Tablada es inundable? Está más que atestiguado", se pregunta Hernández. "Es un debate innecesario, una discusión que no debería ocurrir". "Para el alcalde, Tablada es un problema, y no lo es para Sevilla. Es un problema para los propietarios. Tablada es un tanque de tormentas natural, una llanura de inundación". Un parque que podría ser como una laguna naturalizada, un parque preparado para recibir el agua. Lo defiende Hernández como lo defendía Fustegueras al elaborar el PGOU de 2006. 

"Querían La Moraleja en Sevilla, no iban a ser VPO ni vivienda asequible"

La Mesa por Tablada tiene en mente que no fuera solamente el Ayuntamiento, sino más administraciones, las que participasen en crear y mantener ese parque. "Hay una falacia inicial, y es que el alcalde argumenta que Sevilla no puede permitirse un parque como el Alamillo, que gestiona la Junta. Más allá de que hay dinero para otras cosas en lugar de para esto, es que son diferentes". Un parque que piensa con ciertas zonas arbóreas, carriles bici... Pero "nadie piensa en un parque como el Alamillo de bancos para merendar, ni en ese mantenimiento. Sería un parque que estaría en épocas de estiaje de color amarillo". Entre las administraciones que podrían gestionar Tablada como un consorcio están Ayuntamiento y Junta, pero también Gobierno de España y Diputación de Sevilla. "Y estamos de acuerdo con que así sea".

Entre tanto, asume que deben darse muchos factores para una tragedia como la de Valencia, pero lamenta que es "la definición estricta de pelotazo lo que quieren hacer en Tablada. Comprar, que lo urbanicen en el PGOY y construir viviendas. Es el negocio del siglo, con beneficios pujantes para esas empresas. Pero nada compensaría perder Tablada como zona inundable. Para una ciudad no sale a cuenta, por los daños que se generan, de poner en riesgo a familias, y también daños económicos. Además de perder los grandes beneficios para Sevilla, los de seguridad contra las inundaciones, y tener una zona verde nueva". Hernández, además, pronostica que el proyecto "no es de VPO ni mucho menos. Se llegó a hablar de una especie de La Moraleja en Sevilla, viviendas de lujo, que ni siquiera contribuirían a mejorar la vivienda en la ciudad. No se sostiene ni por la creación de empleos".

Las cuatro posturas del alcalde de Sevilla sobre Tablada

El alcalde de Sevilla ha mantenido cuatro posturas sobre la dehesa de Tablada. Preguntado por lavozdelsur.es, el Ayuntamiento de Sevilla no ha ofrecido una respuesta sobre el asunto.

  • En campaña electoral, en abril de 2023, señala en una entrevista en la SER, señala que ve compatible construir un gran parque periurbano junto a viviendas. En junio de 2023, tras ser proclamado alcalde, insiste en la idea de que unas 200 hectáreas sean para viviendas.
  • En noviembre de 2023, se desdice parcialmente y señala que Tablada será "lo que los sevillanos quieran", rechazando en el pleno pronunciarse sobre las viviendas, lo que chocó a Vox tras las promesas unos meses antes.
  • Tras la DANA de Valencia, el pasado lunes 4 de noviembre decía también en la SER que "este tipo catástrofes naturales nos tienen que llevar a repensar muchas cosas y si evidentemente hay zonas que son inundables, más vale olvidarse de ellas. No tiene sentido que pensemos en urbanizar zonas inundables, como las que se han inundado en Valencia".
  • Apenas tres días después, en un foro de ABC vuelve a matizarse a sí mismo. "Yo no sé en este momento si todas esas hectáreas son inundables. Creo que no, pero evidentemente, en zonas inundables, si la ley dice que no se puede edificar, no se puede edificar". Abría la puerta, de nuevo, a rescatar el proyecto.