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Un McDonald's no es el termómetro de una ciudad... ¿o sí?

Jerez es una ciudad que colecciona récords peculiares, el último es el del cierre de otra hamburguesería –el segundo– de esta multinacional: entre el autóctono "¿por qué, 'zeñó', por qué?" y la fiereza de Ottawa

09 de enero de 2024 a las 19:39h
El logo de McDonald's, en un local de Jerez.
El logo de McDonald's, en un local de Jerez. MANU GARCÍA

“He visto cosas que vosotros no creeríais, he visto atacar naves en llamas en los confines de Orión (…) pero todo eso se perderá como lágrimas en la lluvia”. Así empezamos 'El Billetito', con el famoso monólogo de Rutger Hauer en ‘Blade Runner’ momentos antes de morir, aunque sea a la manera replicante. He visto cosas que vosotros no creeríais… hubo un tiempo en que no era raro leer artículos de prensa que, en algún momento, introducían este monólogo cuando se iba a hacer referencia a un hecho raro, insólito, por eso nos ha parecido bien rescatar ese momento bastante chulo de la historia del cine para hablar de algo bastante más prosaico que ya ocurrió a mediados de los 90: el cierre de un McDonald's en Jerez.

La cuestión no es que la generación Z esté conociendo que puede que en el mundo real cierre un McDonald's, el caso es que los más talluditos, incluidos los 'old millennials', con el cierre actual vamos por el segundo y, sí, nadie en el mundo real ha visto el cierre de dos McDonald's en una misma ciudad. Se dirá que son traslados, que siguen los mismos franquiciados, se dirá lo que se quiera decir, pero el dato cierto está ahí. Y no ha ocurrido en el Metaverso o en algo más antiguo como SIMS. Dos cierres, dos. Inédito. Y en Jerez.

En realidad, en Jerez no deberíamos extrañarnos de nada, ya que es una ciudad en la que pasan todo tipo de rarezas. Lo de tener una deuda de 1.126 millones de euros, por ejemplo, al final se tiene que notar, dentro de unas cuantas generaciones estará en el adn. Recordemos, por ejemplo, que miles de personas salen durante cuarenta días –y sus respectivas noches– armados con una pandereta de a euro del chino a cantar villancicos por las calles a pleno pulmón, así que, al final, muchas de ellas, no están donde estarían más a gusto, que es en el burguer. Claro, el clima no es el de Ottawa, la capital de Canadá, ciudad en la que Paco Sánchez Múgica publica en un artículo que se cerró otro McDonald's después de que registrara como 800 altercados al año. ¡En una ciudad sin Zambombas! En cuanto se pueda, lavozdelsur.es enviará a su mejor reportero para saber qué ha ocurrido en Ottawa, por supuesto...

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