Vaya, 236 personas que tenían pensando ir al médico o a enfermería en el centro de salud Jerez-Centro alguno de los tres días laborales de la Semana Santa (bueno, los sábados siguen siéndolo) decidieron cambiar de idea. Es lo que tiene hacer planes con antelación: te levantas con algo de tos, pides cita, la coges o te la apuntas, tan 'pichi', y luego te das cuenta de que te vas de vacaciones o caes en que sale 'tu' Cristo o 'tu' Virgen o viene de vacaciones tu cuñado de Brazatortas. Total, que se te olvida anular la cita, que pa' qué. Si la sanidad es gratis, pues qué más da.
Si hacemos una proyección matemática así, a lo Von Neumann, de esas 80 personas diarias que en Jerez-Centro 'declinaron' ir a la cita sin comunicarlo, teniendo en cuenta el resto de centros de salud de Jerez, la población del municipio y la que tiene Andalucía, incluso introduciendo correcciones a la baja (la gente de los pueblos es más formal, sin duda), salen no menos de 60.000 citas a la basura en toda la comunidad, de Lunes a Miércoles Santo. Y con correcciones. Pero como si son 50.000, vaya, que no deja de ser una barbaridad.
Bien... la Junta lo que tiene que hacer ahora es aprender de lo ocurrido, nada de sancionar. Después de recomendar poco antes de que comenzara la Semana Santa que los centros educativos públicos se 'impregnasen' de las costumbres, ritos y música que son propios de esos días, podría hacer lo mismo con la Sanidad. Educación y Sanidad, las dos 'patas', como les gusta decir a políticos y periodistas, sobre los que descansa la política social, lo público. Así que volvamos nuevamente a las matemáticas: ahora se trataría de analizar todas las curas y mejorías que 'milagrosamente' se han producido sin necesidad de atención sanitaria y cruzar el motivo de la cita con los Cristos y Vírgenes que salían ese día en Andalucía. Pura estadística para establecer qué 'santo' es mejor para la dermatitis, cuál para los problemas estomacales, o cuál es infalible para los catarros. Con las nuevas tecnologías, está chupado. Todo sea por el Estado del Bienestar...
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