Con estas palabras se podría resumir el capítulo final de ese Noviembre Nacional que pareciera escrito y dirigido por el añorado Berlanga. El último reducto de la fallida toma de Ferraz como si de una nueva Bastilla se tratara está siendo protagonizado por un pequeño grupo de irredentos ultracatólicos que en los momentos de mayor esplendor del movimiento insurrecto ante la sede socialista ya se habían convertido en la anécdota con su rezo diario del rosario megáfono en mano.
Pues en estos días del puente prenavideño, cuando las cohortes de extrema derecha violenta se han retirado a sus cuarteles de invierno a seguir viéndolas venir, ahí siguen ellos mostrando una carencia absoluta de sentido del ridículo. Y una vez que Abascal se dedica a viajar por Tierra Santa para apoyar a la extrema derecha impulsora del exterminio palestino le ha tocado el turno a Carla Toscano, extremista friki donde las haya, para visitar a los luchadores del rosario por la libertad y fotografiarse a Dios rogando y con el rosario dando.
Y mientras tanto, más allá de ese teatrillo ultra nostálgico, la vida sigue discurriendo por los derroteros de ese acuerdo político que ha permitido a Sánchez conformar una nueva coalición de gobierno sustentada en la mayoría parlamentaria que Feijóo y el Partido Popular fueron incapaces de configurar. Y del estribillo de que ellos ganaron las elecciones pasaron de inmediato a la canción del verano preferida de la alianza con separatistas y etarras, con más años ya que las dos gardenias de Machín.
Ahora el nuevo single remasterizado y estrenado en estos días, que no deja de ser otro clásico de la discografía popular, es “Del Consejo del Poder Judicial no nos moverán”, con letra y música del sector conservador de dicha institución que cumple en estos días cinco años desde su fecha de caducidad que el PP y Feijóo han considerado como fecha de consumo preferente. Cómo será lo escandaloso de la situación que hasta el propio presidente del CGPJ ha realizado una propuesta para renovar de una vez por todas a sus componentes.
Por otro lado, este nuevo tiempo ha traído consigo que el IBEX 35, el supuesto termómetro que mide la estabilidad económica, haya saludado con subidas la constitución del nuevo gobierno al tiempo que las autoridades económicas europeas reconocen que nuestro país es el de mayor crecimiento económico de la Eurozona con una tasa cuatro veces mayor que su media. Y ayer mismo se conocía que la ministra de Economía Nadia Calviño será la elegida para presidir los próximos seis años el Banco Europeo de Inversiones, cuestiones todas ellas que debemos agradecer sin lugar a duda a los de a Dios rogando y con el rosario dando, amén.