El periodista, investigador y escritor madrileño José María Zavala ha presentado en Sevilla su nuevo libro Los Doce. Un retrato desconocido de los apóstoles, editado por Espasa en 2025 y que en sólo dos meses ya ha sacado cinco ediciones. “Son doce 12 traidores a Jesús” y “Los apóstoles fueron unos cobardes” son frases contundentes del autor que evidencian el paralelismo de la sociedad actual con la del siglo I d.C. Según Zavala “Jesús se siente traicionado entonces como hoy también es traicionado, renegando su figura”. De ahí que este relato histórico es de rabiosa actualidad”. A pesar de ello, fueron mártires al evangelizar la palabra de su maestro, excepto Juan que murió de mayor y Judas Iscariote que se suicidó.
Los Doce completa su anterior libro Últimas noticias de Jesús. “La persona más importante de la historia es Jesús de Nazaret. De hecho, este libro es un instrumento para acercar la figura del Señor. Sus discípulos también tienen importancia, aunque en menor medida, pero son grandes desconocidos. He tratado de divulgar los defectos, virtudes y las miserias de los apóstoles. Esta obra va dirigida tanto a personas creyentes como no creyentes”, señala Zavala.
Para elaborar este nuevo relato histórico el escritor se ha documentado a través de los Evangelios, los Hechos de los Apóstoles, los Padres de la Iglesia y los descubrimientos arqueológicos que son una gran fuente de información. "Eran personas de carne y hueso. Por ello, he querido plasmar un retrato muy humano para que cada persona se identifique con uno de ellos. Los apóstoles nos enseñan muchas cosas hoy en día. Yo me identifico especialmente con Pedro, al que negó a Jesús tres veces; es el príncipe de los apóstoles, de origen humilde, pescador, un hombre rudo y tosco", explica José María Zavala.
Los apóstoles
Juan, el vidente de la isla de Patmos que escribió el Apocalipsis, es el único que permanece al pie de la Cruz cuando el Señor es Crucificado en el Gólgota, junto a la Virgen María, María Magdalena y María de Cleofás. "¿Dónde están los demás? Huyen despavoridos de miedo. Y antes de ser crucificado, cuando lo apresaron en el Huerto de Getsemaní, también lo dejaron sólo y huyeron. Son 12 traidores a Jesús. Por eso digo que los apóstoles fueron unos cobardes", comenta Zavala.
Mateo, El Publicano, es originariamente recaudador de impuestos, era rico, pero tuvo una conversión, ya que dejó todo por Jesús. San Bartolomé fue desollado vivo por los persas; en la isla de Roma o Tiberina, situada en el río Tíber, está la Basílica de San Bartolomé donde están enterrados sus restos. Andrés, el discípulo silencioso y hermano de Pedro, fue el primero de los apóstoles en recibir la llamada de Jesús y su posición entre los doce goza de gran prestigio y preeminencia en su época y entre las primeras comunidades cristianas.
Felipe ocupa el quinto lugar en la lista apostólica, por detrás de Pedro, Andrés, Santiago y Juan; un hombre corriente, un galileo de Betsaida, cuyos restos se encontraron en las ruinas de Hierápolis, en el corazón de la actual Turquía. De Tomás se dice que alargó su dedo para tocar las manos estigmatizadas de Jesús, aunque no se sabe a ciencia cierta; la falange de su dedo índice está conservada hoy en la Capilla de las Reliquias de la Basílica de la Santa Cruz en Jerusalén.
El único apóstol cuyos restos descansan en España es Santiago el Mayor (el hijo de Zebedeo), hermano del también apóstol y evangelista Juan. Puede considerarse un auténtico privilegiado, ya que está presente en los momentos más importantes de la vida de Jesús como es la agonía en el huerto de Getsemaní, al inicio de la Pasión o en la Transfiguración en el monte Tabor. Es el más conocido por los españoles, al ser patrón de España y en la Capilla de las Reliquias de la catedral de Santiago de Compostela se conserva su cráneo, ya que murió decapitado.
A Santiago el Menor (el hijo de Alfeo) se le denomina en los Evangelios "el hermano del Señor" porque probablemente fue primo suyo o un familiar; también se le conoce con el apelativo de El Justo. Judas Tadeo es muy popular en Sevilla, donde se venera su imagen en la iglesia de San Antonio Abad; algunas de sus más valiosas reliquias se custodian en el Santuario de San Salvador in Lauro, en el corazón de Roma. Simón es el apóstol más desconocido de todos que acredita una apasionada fidelidad a la ley del Antiguo Testamento; las leyendas señalan que Simón fue en realidad el sucesor, como obispo de Jerusalén, de su hermano Santiago.
Según Zavala, Judas Iscariote "es el símbolo tradicional de la traición. Actualmente sigue teniendo muy mala fama y es un nombre maldito. En la Archibasílica de San Juan de Letrán, en Roma, se ha borrado su nombre. En Alemania, por ejemplo, los funcionarios del Registro Civil pueden impedir que los padres pongan el nombre de Judas a sus hijos varones".
Sobre todos ellos Jesús tuvo el poder de la atracción, ejerciendo un magnetismo.