La Guardia Civil ha detenido al presunto piloto de la narcolancha que con su embestida causó la muerte de dos agentes en el puerto de Barbate el pasado mes de febrero. Karim E.B. 'El Enfadao', esos son su nombre y su apodo, ha sido detenido en Cádiz –por cierto, Cádiz dicho en modo impreciso... ¿En qué punto de la provincia se ha detenido a Karim? ¿O no se matiza porque ha sido en la capital?– después de que se diera por supuesto que se ocultaba en el norte de Marruecos.
Quedan muchos aspectos de esta detención por aclarar, igual que sobre lo que ocurrió aquella fatídica noche tras los dos crímenes del puerto de Barbate y las primeras detenciones; incluso hay varios porqués de esas detenciones que están en el aire, como por ejemplo si Kiko 'el Cabra', el primer acusado y detenido horas después de los hechos en La Línea, pese a sus declaraciones, se prestó voluntariamente a comerse un 'marrón' mientras los auténticos culpables ponían tierra de por medio. Cabe suponer que, en los próximos días, se irá dando a conocer más detalles sobre la operación que ha permitido la detención de Karim, detalles, por ejemplo, sobre "las tres órdenes internacionales de captura" que se han emitido al hilo de esta detención por parte del Juzgado de Instrucción nº 1 de Barbate.
Los familiares de los guardias civiles fallecidos y heridos aquella noche han dejado entrever en sus primeras declaraciones que con esta detención se va por el buen camino, pero que eso no exime de responsabilidades –así debería ser– a los mandos de la Benemérita que autorizaron aquella operación en el puerto de Barbate en condiciones tan desiguales, condiciones que, desde su punto de vista –y así es– se siguen dando con demasiada frecuencia en la lucha contra el narcotráfico que lleva a cabo la Guardia Civil en la provincia de Cádiz, desde el Estrecho hasta Sanlúcar.
Bien, la Guardia Civil y la Justicia siguen trabajando y ahora todo indica que en la senda correcta. Hay que dejar tiempo para trabajar... y para responder.