Éramos pocos y parió la abuela. Es una expresión al uso popular para cuando se avecina al malo. Sin duda es sarcasmo puro y enfatiza algo que ya venía mal y se agrava. Un ejemplo es el falso empadronamiento de la candidata fascista a la presidencia de la Junta, la Sra. Olona, que hace honor a que de la casta le viene al galgo.
Podría ser diputada por Alicante, pero no, ella misma dice que se siente andaluza desde que tiene uso de razón, motivo, supongo, por lo que la bautizaron como Macarena. Y, como de la casta le viene al galgo se empadrona en Salobreña en una vivienda en la que no vive, hecho corroborado por el propio dueño de la misma, ya que, este no está dispuesto a mentir, aunque, de momento, parece que sí que ha cooperado en un delito de falsedad en documento oficial, que es el presuntamente cometido.
Es sabido que la inscripción en el padrón municipal solo se produce cuando la persona solicitante aporta las debidas pruebas documentales, por ejemplo, titulo de propiedad, o en su caso, contrato de arrendamiento y con este certificación de la persona propietaria de que Dª Macarena vive allí, de no ser así, se debe considerar que se está reflejando una realidad falsa, inexistente y tal como así se presenta en sede del registro municipal.
En este sentido, declara la jurisprudencia de la sala segunda del Tribunal Supremo que no se está ante una simple declaración para generar el empadronamiento, sino que se trata de la presentación de documentos mendaces, que falsean una vecindad que en ningún caso existe. Imagínense las personas lectoras que esa misma operación la hubiera hecho alguna persona solidaria con personas inmigrantes, de buen seguro, Dª Macarena, habría emulado, como mínimo, a Dª Rocío, fascista como ella, cuando hace un par de años, en Sevilla, para denunciar la delincuencia, se plantó frente a un centro de acogida para menores extranjeros, seguramente, para esas torcidas mentes no se trata lo mismo cuando las infracciones las cometen personas como las citadas, lo mismo, pensarán los condenados y correligionarios, Sres. Serrano y Espinosa de los Monteros.
En el caso de la Dª Macarena, el delito presuntamente cometido por la misma es el de falsedad en documento oficial con la finalidad de obtener el empadronamiento en la localidad granadina de Salobreña, faltando a la verdad y con un soporte documental falso. Es a lo que se refiere el artículo 392 del Código Penal cuando describe que será penado el particular que simule un documento en todo o en parte, de manera que induzca a error sobre su autenticidad, y/o, altere sus requisitos esenciales, de tal manera que se confecciona un documento de forma deliberada para perturbar la realidad jurídica, presentando una situación absolutamente inexistente, desprovista de verdad, es decir, transformando un documento oficial en una patraña. La persona funcionaria que realiza la inscripción no es sino el instrumento utilizado por Dª Macarena para ejecutar la presunta falsedad en documento oficial.
A pesar de todo lo anterior, dicen algunas encuestas que la formación fascista VOX mejorará sus resultados electorales en Andalucía, si esto fuera así, sería la evidencia de que la política como arte para mejorar la vida de las personas ha dejado de existir y su lugar lo ha ocupado la peor propaganda. Ahora bien, si triunfa la buena política quien no tendrá opción alguna en Andalucía será VOX, cuyo único mérito reconocible es el de la habitual amenaza al gobierno de coalición PP- Ciudadanos con retirarle su apoyo si seguían defendiendo la existencia de violencia machista o que Andalucía fuera tierra de acogida, siendo, en este sentido, también, que Dª Macarena, sin sentir bochorno, se presenta como la garantía de que Andalucía sea gobernada por una española y no por un inmigrante ilegal.
Andalucía no se merece un nuevo escarnio como ya le hizo el fascismo, ni ser humillada por los señoritos venidos de la capital del Reino que a modo de cortijo invadieron nuestros campos para su disfrute, caza y fiestorros, todos disfrazados como monigotes folclóricos. Que la Sra. Olona forme parte del gobierno andaluz, significa dar entrada a quien quiere acabar con el estado autonómico, por tanto, eliminar el autogobierno andaluz, es, además, una admiradora de Putin, euroescéptica, negacionista de la violencia machista, de los derechos de la mujer y del cambio climático, pero igualmente fiel aliada de la fascista Sra. Le Pen que tiene como objetivo inmediato poner impedimentos a la agricultura andaluza, a la que ve como enemiga, compartiendo ambas, así mismo, el discurso de odio a la persona diferente a su raza, credo y pensamiento político.
La Sra. Olona no es solo un fraude, es la involución, quiere acabar con los avances y derechos conseguidos tras muchos años y esfuerzos colectivos. Y, es enviada a Andalucía a modo de capataz de Madrid para recuperar la costumbre franquista de que solo desde ahí se gestionan correctamente los intereses económicos, culturales y económicos andaluces. Nos quiere volver al túnel del que salimos un 4 de diciembre de 1977 y que ratificamos en referéndum el 28 de febrero de 1980, cuyo mensaje democrático lleno de soberanía popular no fue otro que: ¡Andalucía como la primera!