Un edil del PP, responsable de Cultura en Torrox, (Málaga) compara a los migrantes con animales y dice que en Canarias están contagiando el tifus: “Metemos el tifus aquí, no sabemos lo que nos pueden traer” y afirma que no se sabe si los migrantes van a robar un coche y menciona que para su control se les pudiera poner una marca como a los animales: "Como no les pongan una marca como a los animales que les ponen una pulserita... no sé cómo van a poner un control a estas criaturas que van a vagar por ahí dentro de un mes". Desde entonces hemos vuelto a poner el tifus en circulación. Pero que es el tifus, cómo se diagnostica, qué síntomas tiene, cuál es el tratamiento.
Ante ello, @MistralS contestaba diciendo: @nacholaisla Vecinos de Torrox responden al concejal del PP que teme que los migrantes traigan “tifus”: “Hay que dar una oportunidad a las personas”. O @el_pais: “Se está hablando mucho, pero a mí no me estorban. Lo que ha hecho el ministerio está muy bien. Hay que dar una oportunidad a las personas”. Vecinos de Torrox responden al concejal del PP que teme que los migrantes traigan “tifus”. Y hablaban de Salvador Escudero, @JuanmiGG_News, @Rafns61, @rociopalaciosh @JoseleAguilar, @pardodevera, @achajim, @AmparoRubiales, @Carmen_malaga, @ridermarina, @DinaBousselham, @SALSALUKI @MNievesRamirez, @asierbijoux,…. Y cómo decía @Cahoray también @nataliag_vargas: "Ni tifus, ni aumento de la criminalidad: los datos que desmontan los bulos contra la inmigración en Canarias. El Servicio Canario de Salud no ha registrado ningún caso de esta enfermedad en las Islas, ni entre la población residente ni entre migrantes", decía @eldiarioes o @AndreaDguezT.
El tifus endémico es una enfermedad infecciosa causada por bacterias del género Rickettsia. Por tanto, es una enfermedad bacteriana. Se transmite a los humanos por piojos o pulgas que generalmente se infectan con Rickettsia cuando se alimentan de animales infectados, como ratas y zarigüeyas. El tifus endémico algunas veces se denomina tifus exantemático. La bacteria que causa este tipo de tifus normalmente se propaga de ratas a pulgas y a humanos.
En un lapso de tiempo entre 7 y 14 días desde que el organismo entra en contacto con la bacteria Rickettsia, empiezan a aparecer los síntomas.
Los síntomas del tifus endémico pueden incluir:
• Fiebre alta, escalofríos
• Confusión, disminución del estado de alerta, delirio
• Tos
• Dolor articular y muscular intenso
• Luces que aparecen muy brillantes; es posible que la luz lastime sus ojos
• Presión arterial baja
• Erupción que comienza en el pecho y se disemina al resto del cuerpo (excepto a las palmas de las manos y a las plantas de los pies)
• Dolor de cabeza intenso
La erupción inicial es de un ligero color rosa y se desvanece al hacerle presión. Posteriormente, la erupción se vuelve rojo pálido y no se desvanece. Las personas con tifus grave pueden también presentar pequeñas zonas de sangrado dentro de la piel.
Las primeras manifestaciones de la enfermedad son fiebre, dolor de cabeza y fatiga. Sin embargo, al cabo de unos días, aparece una erupción que cubre gran parte de la piel. La presencia de estas marcas en la piel confirma, en muchas ocasiones, la infección por Rickettsia. En algunas personas, los síntomas pueden agravarse y aparecer tos, diarrea, vómitos y dolores de estómago.
No obstante, será después de un análisis de sangre donde se podrá establecer un diagnóstico más preciso. Al ser una enfermedad poco común, las pruebas de laboratorio pueden no estar disponibles todo el tiempo. Es por ello que la enfermedad puede causar serios problemas en algunos países al no tratarse de forma rápida.
El tratamiento indicado para tratar el tifus está basado en la aplicación del antibiótico doxiciclina. Este antibiótico puede ser administrado a personas de cualquier edad y se debe tener en consideración el peso del paciente para suministrar la dosis apropiada. Cuánto antes se inicie la aplicación del tratamiento, más efectivo será su efecto contra la Rickettsia. Además de la aplicación del antibiótico, se supervisa el estado de salud general del paciente y se controlan los síntomas en la medida de lo posible.
Existen diferentes factores que pueden propiciar que la enfermedad del tifus deje secuelas graves en el organismo o, incluso, cause la muerte. Los niños con malnutrición y los ancianos constituyen la población con mayor riesgo de presentar secuelas a causa de esta enfermedad.
Otras secuelas comunes tras haber padecido tifus son:
• Insuficiencia renal. Los riñones pueden no funcionar de manera apropiada, causando malestares y fallos orgánicos en los individuos.
• Afecciones al sistema respiratorio. Después de superar el tifus, muchas personas sufren problemas respiratorios durante largos periodos de tiempo y reaparecen de forma ocasional.
• Daños al sistema nervioso. El sistema nervioso se ve afectado causando problemas de motricidad y otros desequilibrios del sistema.
La mayoría de las personas suelen superar el tifus sin mayores complicaciones, pero las personas que viven en zonas apartadas o con poca asistencia sanitaria pueden experimentar algunos de los tipos de secuelas comentados.
El tifus exantemático padecido de forma epidémica en los años consecutivos a la Guerra Civil fue momento de una peculiar movilización científica en el Instituto y Escuela Nacional de Sanidad que comenzaban su andadura bajo el franquismo, contando con una significativa participación multinacional, desde la Fundación Rockefeller al Instituto Pasteur, que convirtió España en nudo donde se cruzaban las teorías y las prácticas de las escuelas más relevantes en torno a la consecución de una vacuna eficaz.
Las carencias informativas del momento, cierta tensión entre los participantes y la rápida evolución de la situación privaron de resultados prácticos inmediatos a la Sanidad española, lo que no puede decirse en lo tocante al recorrido profesional de varios de los científicos funcionarios implicados. La auténtica explotación de resultados de esta experiencia se llevó a cabo en los Estados Unidos años después.