¿Empezó la nueva fase sin tapaderas? Una parte mayoritaria de los jueces, que a su vez son una minoría muy minoritaria de la sociedad, "sesudamente" actúan contra los derechos de la mayoría de esa sociedad, y alegan pertenecer a algo llamado "Poder (por cojones) Judicial". Ellos dicen que administra justicia. Inédito: ¿Justicia contra los intereses de esa sociedad mayoritaria que eligió a sus representantes? Ellos no fueron elegidos. ¿A quién representan? ¿A ellos mismos? ¿Quien bien te quiere te hará llorar?
Divagaré un poco, a ver si ello me concentra. Concentrarse, algo que recomiendo al Tribunal Constitucional, (T.C. = Total Confusión) e intentar que la sigla T.C. se convierta en Totalmente Cierto, en el asunto a discutir.
Divagando y dando vueltas por internet descubro:
Mafia: Existen numerosas teorías sobre el posible origen de la palabra mafia, cuyo uso comenzó a extenderse a mediados del siglo XIX. Una hipótesis es que procede del vocablo árabe mahya, 'bravuconería, jactancia, chulería'. Otros creen más probable que este término provenga de la antigua expresión toscana maffia, que quería decir 'miseria' (Wikipedia).
Ya en Puerto Rico y otros países limítrofes estiman que es:
Grupo de personas que se organiza veladamente para proteger sus intereses.
Grupo de personas que controla completamente una actividad o negocio impidiendo cualquier competencia.
'Mafiada': Acción que lleva al engaño a una o varias personas para aprovecharse de ellas.
Judicatura: Conjunto de los jueces y magistrados de un sistema judicial. Como se forma y establece este sistema, es necesario hacer otro estudio para definir tipos de democracias, incluida la “sui géneris” española. Los jueces deben aplicar las leyes que otros establecen: Congreso y Senado, pero ellos deciden si esos otros pueden o no pueden establecer leyes... y qué tipo de leyes. O sea...
No soy muy amigo del inglés sobre todos cuando hay expresiones nuestras muy claras, pero ahora, se ha puesto de moda en todo el mundo (pues se practica en "idem"), la palabra "lawfare" "guerra de leyes o jurídica", así que pensemos y vamos adelante:
Si hay un objetivo mundial por destruir la democracia, la primera pregunta es ¿a quién interesa esta guerra? ¿A quién hace daño la democracia?
Inicialmente, esa entrada de los jueces y fiscales en el nuevo tipo de guerra se asoció en la lucha contra la corrupción y tuvo sus efectos positivos, pero con el transcurrir del tiempo, se centró en pequeños peces (que está bien que paguen) escapándose los gordos (rompen las redes) y encarcelando a los pequeños y algunos enemigos circunstanciales.
La mayoría son corruptos menores y otros muchos inventados, que mientras no puedan desmontar y "demostrar" lo que esos jueces ya saben que es mentira (hay inversión total de los principios jurídicos), permanecen encarcelados (Lula y otros) y apartados de sus funciones dando paso a quienes les acusan.
Ante los buenos resultados y lo fácil que resultaba engrasar a la oxidada judicatura y sus acólitos de la prensa (des-informativa), la cosa se transformó ampliándose a una guerra política por la vía judicial-mediática, abarcando intereses ocultos, políticos, geopolíticos y económicos. Participan jueces, fiscales, periodistas, sindicalistas, líderes de 'opinión', artistas... Se intensifican las denuncias sin pruebas, prisiones preventivas, procesos sumarios (sin defensa), allanamientos, amenazas... Esta táctica en los últimos años se ha intensificado en América Latina, África y algunos países árabes. En estos últimos, si fuera necesario, se eliminaría directamente, y poco a poco se va instalando en Europa.
En esta guerra hay engaño a la opinión pública, pero no disimulo, y se opera, desde arriba, con prepotencia y con la seguridad de tenerla maniatada en su ignorancia. No obstante, utilizan la mentira y miles de justificaciones y razonamientos falsos para utilizar sin pudor el aparato judicial, que en un acto inaudito, se sitúa por encima de los poderes ejecutivos y legislativos, en teoría iguales a él, e instaurando de hecho una juristocracia enviando, de paso, las leyes a la basura. Los medios de información y comunicación previamente 'aceitados' no chirriarán y aplaudirán.
Pero no nos equivoquemos, esta guerra judicial o "lawfare" no es solo una persecución con el deseo exclusivo de eliminar un gobierno, o partidos políticos determinados, ni a sectores progresistas, desmoralizándoles con estas "derrotas". Con un falso argumento legal, busca frenar la protesta social, debilitar la escasa democracia criminalizando el partidismo y la militancia política, busca fortalecer al neoliberalismo despolitizando al Estado, reforzando su aparato represivo por excelencia: El poder judicial.
Unas líneas arriba preguntaba: ¿a quién hace daño la democracia?, habría que añadir: ¿qué se quiere tapar? Porque no hay duda que algo se quiere tapar.
¿Cuántos juicios hay atrasados en España? ¿Cuáles son y que se juzga? ¿Cuánto tardan algunos juicios y sobre todo si son de tipo de fraude económico o de corrupción? Detrás de la no renovación del CGPJ y del Constitucional a mí no me cabe duda de que hay algo más que la renovación de las personas ¿Quiénes accederán y que posiciones jurídicas adoptaran? ¿Se está encubriendo algo? ¿Qué causas están atrasándose? "Involuntariamente", claro. Probablemente se descubrirá tarde.
Es una guerra por otros medios. Saben que no son creídos y, por otro lado, cada vez es más difícil una violencia directa. Hay que embaucar, quién mejor que los "impolutos" e inmaculados defensores de la ley para que hagan aparecer como 'legal' una acción orientada a quebrar la legalidad, incluida la desestabilización de un gobierno de turno. Es una estrategia típica reaccionaria (no todos los reaccionarios son nazis-fascistas, pero estos si son todos reaccionarios), que hace parecer como legal y no violento, algo que en realidad implica el uso de una fuerza que saben que tienen y dar apariencia 'legal' a acciones orientadas a quebrar la legalidad.
Como ya juegan con el consabido "la justicia es lenta, pero es justicia", no tienen prisa. Para suspender, encarcelar, multar, en lo que va contra sus ideas, son rapidísimos, hay hasta procesos sumarísimos en las decisiones y lentísimos en las reparaciones. No olvidar que los procesos lentos y en los atrasos innecesarios, el beneficiario siempre es el delincuente, y los jueces lo saben. Guerra blanda desmoraliza, pues hace aparecer como que la ley y los jueces apoyan lo justo y verdadero, aunque sean los principales transgresores. Ahora en este caso de España habrá que esperar la sentencia (seis días o seis meses, y el tiempo corre a su favor), que esperemos sea fundamentada y sobre todo expliquen en que estaba equivocado el procedimiento y como debe hacerse en un futuro, para no "transgredir" la Constitución, que parece ser, que salvo unos pocos españoles (jueces naturalmente) nadie conoce bien.
¡Vota bien! Para ello hay que mirar a quién.
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