Ayer, 3 de abril de 2025, tuve el privilegio de asistir como presidenta de AFRA Mujeres a la presentación del II Plan de Igualdad para la Ciudadanía 2025-2029 en el Museo de la Atalaya, en Jerez de la Frontera. El acto, presidido por la alcaldesa María José García-Pelayo, reunió a un mosaico de voces: desde representantes municipales hasta el Consejo Local de las Mujeres — del que somos vocales —, pasando por el tejido asociativo, las comunidades educativas y el personal técnico que ha dado forma a este documento. Fue un momento cargado de simbolismo, pero también de responsabilidad, porque la igualdad no se construye solo con palabras, sino con hechos que transformen la vida cotidiana de las jerezanas y los jerezanos.
Este Plan, que aún es un borrador y que el Ayuntamiento colgará en su web el próximo lunes para recibir aportaciones ciudadanas, llega con la promesa de ser una herramienta de cambio social. La alcaldesa lo definió como “60 medidas para hacer de Jerez una ciudad más igualitaria y también más europea”. Desde AFRA Mujeres lo vemos con esperanza, pero también con la prudencia que nos da la experiencia: los planes son tan buenos como su ejecución. Por eso, nos hemos comprometido a analizarlo a fondo y a presentar propuestas consensuadas con el Consejo Local de las Mujeres para que este documento no se quede en un cajón, sino que sea una hoja de ruta viva y efectiva.
Un diagnóstico que nos interpela: la desigualdad en Jerez
El II Plan de Igualdad arranca con un diagnóstico que pone negro sobre blanco las brechas de género que atraviesan Jerez. No son datos nuevos para quienes llevamos años peleando por la igualdad, pero sí son un recordatorio de que aún queda mucho por hacer. Según el estudio, las mujeres jerezanas enfrentamos una brecha salarial del 19%, lo que significa que, de media, ganamos 3.870 euros menos al año que los hombres por trabajos similares. En el empleo, la desigualdad también es evidente: hay 6.000 hombres más afiliados a la Seguridad Social que mujeres, y los contratos a tiempo parcial —esos que apenas dan para llegar a fin de mes— están mayoritariamente en manos femeninas.
La educación no se libra de esta radiografía desigual. Aunque en primaria y secundaria la matrícula es casi paritaria, en formación profesional o bachillerato las chicas siguen inclinándonos por áreas como las humanidades o los cuidados, mientras los chicos dominan las ingenierías y las tecnologías. El profesorado también refleja esta realidad: en infantil y primaria, el 80% son mujeres, pero en puestos de investigación o liderazgo educativo, brillan por su ausencia. Es como si el sistema nos empujara, desde pequeñas, a cuidar y a quedarnos en segundo plano.
En el ámbito laboral, la segregación es aún más cruda. Las mujeres copamos los sectores de servicios y cuidados —restauración, administrativos—, mientras los hombres se llevan la palma en industria, construcción o tecnología. Y cuando miramos hacia arriba, el famoso “techo de cristal” sigue ahí: solo el 30% de los cargos directivos en Jerez son ocupados por mujeres. A esto se suma la carga invisible de los cuidados, que recae casi exclusivamente en nosotras, limitando nuestras oportunidades de conciliación y crecimiento profesional.
La violencia de género, la violencia machista en general, el sexismo en las calles y aulas, ese monstruo real que no descansa, también aparece en el diagnóstico. Jerez no es ajena a esta realidad, y el Plan reconoce la urgencia de actuar. En las zonas rurales, que ocupan más del 90% del término municipal, las mujeres enfrentan además un aislamiento que agrava estas desigualdades: menos acceso a empleo, formación o servicios básicos.
Este retrato, basado en datos del Instituto Nacional de Estadística, el Sistema de Información Multiterritorial de Andalucía y las 308 encuestas ciudadanas realizadas, no es solo un conjunto de cifras. Es la vida de miles de mujeres jerezanas que merecen algo más que promesas.
Las 60 medidas: un mapa para el cambio
El Plan se estructura en cinco ejes que abarcan desde la gobernanza hasta la lucha contra la violencia machista, pasando por los cuidados, la representación y el empleo. El Ayuntamiento quiere que todas sus áreas trabajen juntas en pro de la igualdad. Propone formación para el personal municipal, campañas de comunicación inclusivas y un protocolo para evitar el sexismo en todo lo que haga o diga el consistorio. La idea es que la igualdad no sea solo cosa de una delegación, sino de toda la casa.
En el terreno de los cuidados y sostenibilidad apuesta por repartir mejor las tareas, que no sigan cayendo solo en nosotras, y por crear servicios públicos que ayuden en la labor, como guarderías o transporte para mujeres rurales. También se habla de conciliación, con medidas como adaptar horarios laborales y escolares. Las palabras todo lo sostienen, veremos qué medidas efectivas son capaces de poner en práctica tan ambicioso proyecto.
En representación y poder las mujeres se propone que las mujeres estemos en los sitios donde se decide. Desde más presencia en política o asociaciones hasta visibilizar a deportistas o artistas locales, pasando por romper estereotipos en la educación y el deporte. Por ejemplo, habrá charlas con deportistas mujeres para inspirar a las niñas y cursos para profesionales del deporte sobre igualdad.
En empleo, el Plan propone campañas para que las empresas apuesten por la igualdad, formación para mujeres en sectores como la construcción o la tecnología (donde apenas estamos), y ayudas para emprendedoras, migrantes o mujeres con discapacidad. También se quiere sensibilizar a los hombres para que se sumen a trabajos “feminizados”, como el cuidado. En este sentido, creo que las campañas se quedan cortas, si no se cambian las estructuras del propio sistema.
Sobre el punto sociedad libre de violencias sexistas: el corazón del Plan para muchas de nosotras, se incluye talleres contra el ciberacoso, puntos violeta en eventos de ocio, más mujeres en la policía local con formación en violencia de género y un mapa de zonas inseguras del municipio para reformarlas. Medidas que nos parecen del todo insuficientes y prácticas. Que inciden muy poco en la realidad de las niñas y mujeres. Por lo que es el espacio dónde más aportaciones realicemos al Plan desde nuestra asociacion, dados que los datos sobre violencia de género, violencia machista, desigualdad en general de nuestra ciudad son alarmantes, como en otros puntos del país.
Nuestra mirada desde AFRA Mujeres: Estado Actual de la Violencia machista y Desigualdad en Jerez de la Frontera
Violencia Machista: La ciudad de Jerez de la Frontera enfrenta diversos desafíos sociales relacionados con la violencia machista. Los datos más recientes revelan tanto la magnitud de estos problemas como las respuestas institucionales que se están implementando. En el 1º semestre de 2024, respecto a la violencia de género, ha habido un incremento del 8,7% respecto al mismo periodo de 2023. Este registro es el más elevado desde 2020. Lo que evidencia una tendencia al alza en los últimos años de las cuales casi un 30% tenían nacionalidad extranjera. Las dependencias municipales atendieron solo el 36% de los casos de 2024. Por otro lado es necesario señalar las mejoras a implantar y carencias del sistema municipal.
En cuanto a prostitución y Trata, en Jerez se ha observado una evolución en el negocio de la prostitución, con la proliferación de pisos y "casas de masaje" que han migrado del centro a otros barrios residenciales. Las denuncias provienen principalmente de vecinos que se ven amenazados no por las mujeres, sino por los "puteros violentos". Se ha identificado también un cambio en el perfil de las mujeres prostituidas, con una tendencia hacia "mujeres extremadamente jóvenes y pobres", así como una transformación en los métodos de control por parte de los proxenetas, que han reducido la violencia directa al explotar situaciones de extrema vulnerabilidad.
Un caso significativo ocurrió en marzo de 2025, cuando la Audiencia Provincial condenó a 21 años de cárcel a una persona por captar y explotar sexualmente a mujeres brasileñas en Jerez. Las víctimas eran traídas desde Brasil con falsas promesas y obligadas a prostituirse, debiendo entregar el 50% de sus ingresos. Recordemos que en 2024, Jerez se adhirió a la Red de Municipios Libres de Prostitución y Trata, junto con otros municipios de la provincia a propuesta de nuestra asociacion. Como señalamos en su día, esta adhesión, supone "un paso adelante valiente" para reconocer que la prostitución y la trata son "una forma extrema de violencia machista que debe ser abolida".
En 2024, los delitos contra la libertad sexual en Jerez aumentaron un 38% respecto al año anterior, con casi 90 denuncias registradas. Entre estos casos, se denunciaron 17 agresiones sexuales con penetración, lo que representa un incremento del 13.3% en comparación con 2023. Este aumento contrasta con la tendencia general de descenso en otros tipos de criminalidad, como robos y tráfico de drogas. El rango de edades más afectado por estas agresiones incluye mujeres jóvenes entre 15 y 35 años. La violencia sexual en las calles de Jerez sigue siendo un desafío significativo que requiere atención continua por parte del Ayuntamiento y las instituciones locales. Las iniciativas como los Puntos Violetas, los centros de crisis y las campañas educativas son pasos importantes pero insuficientes, es fundamental seguir fortaleciendo estas medidas y fomentar una cultura ciudadana que rechace cualquier forma de violencia sexual.
Los casos de violencia sexual y el sexismo, particularmente aquellos que involucran a menores, han tenido una notable presencia en los tribunales jerezanos. Han sido varios los casos en los que la la Policía Nacional ha detenido a hombres presuntos autores de delitos de agresión sexual contra menores, tanto desconocidos como familiares. En muchos entornos escolares persisten actitudes sexistas que perpetúan roles tradicionales y discriminación hacia las mujeres. Las víctimas adolescentes suelen enfrentar barreras para denunciar casos de violencia sexual, acoso, bullying, acoso en redes, debido al miedo al estigma o represalias.
Es necesario impulsar más programas coeducativos y sensibilización frente a la violencia machista impulsadas por instituciones locales en los centros educativos de Jerez y su comarca. Y Aunque no hay cifras específicas sobre casos de violencia sexual dentro de los institutos, las estadísticas generales sobre violencia machista en Jerez reflejan un aumento preocupante. En 2024, se atendieron 298 casos relacionados con violencia machista en el Centro Municipal de Información a las Mujeres (CMIM), algunos de los cuales involucraron jóvenes entre 15 y 25 años. Pero la mayoría de los casos no se denuncian. Esto evidencia que las adolescentes son un grupo vulnerable frente a este tipo de agresiones.
Y aunque existen programas educativos efectivos, cada vez observamos una menor presencia de programas feministas que combatan los estereotipos de género, el sexismo, y las violencias que sufren las mujeres y niñas no solo en la calle sino en las redes. Es crucial ampliar su alcance e incorporar formación específica sobre violencia sexual y sexista para profesores y estudiantes. Es fundamental continuar fortaleciendo estas acciones, ampliando su cobertura e integrando mecanismos más efectivos para detectar y abordar casos dentro del ámbito escolar. La implicación activa tanto del alumnado como del profesorado es clave para construir entornos educativos seguros e igualitarios, donde se erradique cualquier forma de discriminación o violencia basada en género.
Por otro lado, reconocemos que el recién presentado aprobado II Plan de Igualdad para la Ciudadanía 2025-2029 representa un paso significativo en esta dirección, lo que nos una herramienta eficaz para mejorar, al igual que la adhesión a la Red de Municipios Libres de Prostitución y Trata y el estudio diagnóstico sobre la prostitución. de hecho reconocemos la importancia los mismos. En España, según los datos más recientes, solo el 3% de los municipios cuentan con un plan de igualdad vigente. Esto equivale aproximadamente a 235 municipios de los 8.131 existentes en el país. Jerez es pionera.
En Andalucía, la situación es ligeramente mejor que la media nacional, con un 5% de los municipios que tienen planes de igualdad en vigor. Esto representa 39 municipios de un total de 785. Sin embargo, es fundamental que estas iniciativas se traduzcan en acciones concretas que aborden las causas estructurales de la violencia y la desigualdad, y que proporcionen protección efectiva a las víctimas. La lucha contra estas problemáticas requiere no solo de la acción institucional, sino también de un compromiso colectivo que involucre a toda la sociedad jerezana en la construcción de una ciudad más igualitaria, segura y justa para todas las personas.
Desde AFRA Mujeres, nos parece un paso valiente, sobre todo porque retoma un trabajo que llevaba nueve años parado, como recordó la alcaldesa. Nos gusta que hable de violencia machista, de las mujeres rurales y de las mujeres situación de exclusión, de jóvenes, de igualdad entre hombres y mujeres, porque son realidades que no siempre se ven o se visibilizan. También aplaudimos que se abra a la participación ciudadana, algo que no todos los gobiernos se atreven a hacer.
Por eso, desde AFRA Mujeres estamos estudiando el borrador línea por línea y vamos a proponer mejoras junto al Consejo Local de las Mujeres. Queremos que sea un documento que de verdad nos represente, que no deje a nadie atrás y que tenga propuestas efectivas para combatir las desigualdades y violencias de raíz. Invitamos a todas las jerezanas y jerezanos a que lo lean cuando se publique el lunes en la web del Ayuntamiento y hagan llegar sus ideas. Esto no es solo cosa de feministas o políticos; es un asunto de todas las ciudadanas y ciudadanos.