¿Y ahora qué?
La palabra pagano tiene diversas connotaciones y una larga historia etimológica, así como de concepto religioso y actualmente también puesta de moda popularmente, al ser el nombre utilizado por un famoso luchador mexicano.
1.- Persona que paga, generalmente por abuso, las cuentas o las culpas ajenas.(DRAE) 2.- “Paganus”: del latín ‘habitante del campo o aldea’. .(DRAE)
3.- Que no es cristiano ni de ninguna de las otras grandes religiones monoteístas: cristianismo, el judaísmo y el Islamismo. .(DRAE)
Prefiero quedarme con la definición primera de la RAE: m. y f. coloquial. “Persona que paga, generalmente por abuso, las cuentas o las culpas ajenas”.
Escojo esta definición con total convencimiento de que nos han convertido en paganos de algo tramado hace tiempo y en lo cual no tenemos arte ni parte, estoy convencido de que es el inicio de un nuevo negocio de los poderes financieros para esquilmar a la populación mundial. ¿Nos harán también pagar por la que se viene preparando en Taiwán con China y no lejos de allí con Corea del Norte? ¿Será que nos dirán que China invade Taiwán? Es como si nos contaran que España invade Baleares. Si el mundo dice que Taiwán es China, ¿por qué no se deja que los chinos resuelvan entre ellos? Fracasado como inicialmente planeado, el plan del Covid19 (“El Gran Reinicio”-The Great Reset), por controlar el mundo, han puesto en marcha el hambre y el miedo. Son diferentes frentes de una lucha (con un mismo objetivo), emprendida por el capital financiero y la decena de familias que controlan directa o indirectamente el mundo.
Lo que pienso sobre la guerra en Ucrania, los antecedentes, las sinrazones y los objetivos, ya fue expuesto en varios artículos anteriores aquí publicados y disponibles (cinco sobre la guerra y uno sobre la OTAN). Ahora se trata de ver los resultados y hacía donde caminamos, si un Dios no lo impide, pues los hombres me parece que no.
Y aquí, en esta encrucijada que nos encontramos, ya no se trata de convencer a alguien de quién es responsable de la situación actual. Cada cual tiene su opinión y nadie va a convencer al otro para que la cambie. Puede cambiarse de opinión, eso se espera, pero siempre se dirá y realmente será, por propia convicción. Solo se cambia de opinión, la que sea, si se reflexiona sobre lo que uno piensa y lo que piensan otros, pero la reflexión, el mirarnos dentro con tranquilidad es difícil, sin embargo imprescindible para cualquier solución.
El pasado 28.08.2022, en eldiario.es fue publicado un artículo (“Hay que parar la guerra”) de José Enrique Ayala. Analista de la Fundación Alternativas y a quien no creo se le pueda considerar de forma alguna pro-ruso, hace un análisis muy interesante y real de la situación, independientemente de que yo no esté muy de acuerdo en su concepto de ilegalidad e ilegitimidad, al no diferenciar claramente las condiciones y situaciones que pueden darse y sobre todo especificar quién y cómo se hacen las leyes y en beneficio o defensa de qué o quién, pero es otro tema. Lo que si deja claro es que faltó dialogo en su día y momento y que continúa faltando.
Es muy importante saber leer entre líneas y en la multitud de noticias falsas que la prensa “imparcial y comprada” difunde ver quién está por el dialogo, quién se opone y quién quiere continuar la guerra. ¿Quién organizó la guerra desde antes que esta se iniciara? ¿A quién beneficia? ¿Quiénes la pagan? Aquí ya no se trata de simpatía o antipatía. Los datos dados por importantes empresas analistas y revistas económicas, muchas de ellas de claro perfil ideológico capitalista, son contundentes y claros: La guerra no es Ucrania x Rusia como nos la están vendiendo.
No hay que ser suspicaces para llegar al quid de la cuestión, pues al margen de ideas, de intereses y simpatías, están los datos fríos y concretos.
En otro capítulo más materialista o menos moral, como queramos llamar, son más de 100.000 millones de euros en infraestructuras públicas destruidas, aparte de las viviendas y propiedades particulares, fábricas e industrias aún no evaluado. Según el Times a 26-08-22 la destrucción ya le ha costado a Ucrania al menos 113.500 millones de dólares y es posible que necesitemás de 200.000 millones de dólarespara reconstruirse. 311 puentes, 188.000 coches particulares y más de 24.700 kilómetros de carretera han sido dañados o destruidos.
Más 83.000 millones de dólares la ayuda comprometida. Son cifras mareantes. UK, Alemania, Canadá, UE... Al final veremos la que realmente llega.
Aviones, helicópteros, tanques, drones, lanchas navíos, fusiles, ametralladoras, lanzaderas de cohetes, cohetes, uniformes y las miles de toneladas de municiones.
Lo primero y más importante: Las pérdidas humanas presumibles a día de hoy (entre ambos países, civiles y militares, todos son seres humanos, personas con derecho a la vida, con sus familias y sus sueños, fueran estos los que fueren), se calcula una cifra superior a los 30.000 muertos y heridos en torno a 75.000, más de 6.500.000 (seis millones y medio) de refugiados y no se sabe cuántos desplazados y afectados psiquiátricamente de por vida.
Las ayudas directas de EE.UU en armamento se calcula que superará los 13 mil millones de $US. De la UE no se sabe a ciencia cierta pero por encima de los 10 mil millones de €. El aumento en los presupuestos de defensa en todos los países para apoyo a la OTAN y en el caso específico de España el aumento del PIB para defensa.
¿Quién paga? En primer lugar Ucrania y Rusia con algo irrecuperable: Vidas y dolor por muchos años, además de lo económico. Después los paganos europeos.
¿Quiénes lucran? No hace falta ser un lince. Solo ver los beneficios cuadriplicados de las empresas armamentistas y todas las relacionadas con guerra. Algunos altos mandos militares y empresas constructoras corruptas. Nuevas construcciones y adaptaciones
Adquisición de nuevos materiales, inversiones en estudios de nuevos proyectos y sus correspondientes comisiones, las empresas farmacéuticas y capitalistas en general. La mayoría han ganado mucho dinero, por eso que la guerra no puede parar y hay que inventar otras necesarias e “ineludibles” nuevas guerras, que abran otros “campos de desarrollo y progreso” y naturalmente enriquecimiento.
Los exportadores de GNL (Gas Natural Licuado) de EE.UU. son los grandes ganadores de la crisis del gas en Europa. Su precio es superior en diez veces al del año pasado. Desde el inicio de la guerra los precios se han disparado y una vez confirmado el corte del envío de gas (Sept. 2022) por el problema en el Nord Stream 1, se aumentó automáticamente otro 30%. Este gas procedente de USA, es extraído por el sistema de fracking (fracturación hidráulica), más caro, de mayor contaminación ambiental, más peligros para la salud, la agricultura, contaminación del agua, la fauna, desertización y otros varios riesgos. Sistema de extracción prohibido en España y otros países pero no obstante se mira para otro lado... y se compra.
Otro gran negocio, la construcción de buques para transporte de GNL se calcula que se duplicará en 2022.
Las empresas petrolíferas norteamericanas también aumentaron su exportación y entre otras cosas, aumentaron los robos descarados de petróleo a Siria, donde los norteamericanos mantienen una base militar en zona gasística, en la frontera con Irak. ¿Recuerdan la dramática situación de hambre, atribuida al bloqueo del Mar Negro?
La no salida de grano ucraniano desde el puerto de Odesa, sin especificar claramente el problema de las minas acuáticas colocadas por Ucrania. Pues bien después del acuerdo en Estambul (Pacto por el desarrollo) con y por la mediación de Turquía, de los ochenta y siete buques que han zarpado (a 07.09.22) con trigo y cebada, solo dos con 60.000 toneladas (3% de lo exportado = 2.000.000T.) se ha dirigido a países africanos con hambruna, agravando tal actitud, la catástrofe humanitaria ¿y qué hace la ONU?
El resto han ido a puertos de Grecia, Italia... donde se ha desembarcado el grano y distribuido a países europeos. También se silencia hacia dónde van los miles de tonelada que salen por tierra vía Eslovaquia y Polonia.
Ahora resulta que la guerra en Ucrania es responsable y disculpa para todos los males del mundo, los actuales y los que vendrán. Inflación, hambruna, desempleo, falta de materias primas, chips, problemas de transporte internacional, la caída de las bolsas a pesar de que jamás las grandes empresas ganaron tanto dinero como ahora. Ya no me extrañaría que lo fuera también de las olas de calor, de los incendios y de la falta de agua en todo el mundo y de la sequía de las lagunas de Doñana, la falta de gas natural, petróleo y consecuentes subidas de todo tipo de energía.
Nuestro Presidente de Gobierno y otros altos jefes de Gobierno y Estado se quejan de que Rusia está utilizando el gas como arma de guerra ¿el bloqueo a que está sometida Rusia, es un juego de niños? ¿Qué esperaban que permaneciera de brazos cruzados? Debo recordar que en la “religión política”, si te dan una bofetada en una mejilla, no dice que pongas la otra.