La Hermandad de la Candelaria ha convocado a sus hermanos a un cabildo general extraordinario que se celebrará el próximo martes 8 de abril en la parroquia de Santa Ana, con el fin de presentar y someter a votación el proyecto de un nuevo paso de palio para María Santísima de la Candelaria.
El encuentro está previsto en primera convocatoria a las 20.30 horas y en segunda convocatoria a las 21.00 horas, según consta en la misiva firmada por el hermano mayor, Sergio Garvín, y remitida a los miembros de la corporación de La Plata. La convocatoria contempla como único punto del orden del día la presentación y posible aprobación del citado proyecto.
La propuesta será sometida al criterio de los hermanos en una sesión extraordinaria que refleja el interés de la hermandad por renovar uno de sus elementos patrimoniales más representativos. Se trata del paso de palio bajo el que procesiona la imagen de la Virgen durante la estación penitencial.
Una historia de finales de los 60
La imagen de María Santísima de la Candelaria es obra del imaginero jerezano Manuel Prieto, y desde su incorporación a la hermandad ha ocupado un lugar central en la devoción de sus fieles. Su primera salida procesional bajo palio tuvo lugar en el año 1969, con el correspondiente permiso del entonces arzobispo de Sevilla, el cardenal José María Bueno Monreal.
En aquella ocasión, y ante la imposibilidad de que el paso saliera desde el interior del templo debido a la estrechez de la puerta, la hermandad recurrió a una solución provisional. Se levantó un tinglado en el jardín parroquial, compuesto por andamios y toldos, desde donde partió la procesión durante varios años.
Durante seis estaciones penitenciales, la salida de la Virgen se realizó desde ese improvisado recinto exterior. La situación se mantuvo hasta que la corporación consiguió abrir una nueva puerta en el lateral de la parroquia de Santa Ana, lo que permitió el acceso y salida del paso desde el interior del templo.
La historia del paso de palio de la Virgen de la Candelaria forma parte del acervo cofrade de la ciudad y de la memoria viva de la hermandad. La iniciativa de diseñar y ejecutar un nuevo paso busca renovar y actualizar este símbolo, respetando el legado de décadas anteriores.