Está siendo una de las actuaciones más esperadas en cada fase del Concurso Oficial de Agrupaciones Carnavalescas. Los James Bond del Yuyu volvieron a pisar las tablas del Gran Teatro Falla este miércoles a altas horas de la noche, aunque eso no mermó el repertorio que llevó el humorista y locutor de radio. Además, hubo una gran sorpresa que también permitió sacar una sonrisa al público.
José Guerrero Roldán señaló al anunciar su vuelta que echaba de menos las chirigotas que te hacían reír desde que se abrían las cortinas hasta que se cerraban. Por ello el Yuyu en su pase de cuartos no dio respiro en los dos pasodobles que llevó al Gran Teatro Falla. El primero sobre el amor de Carlos de Inglaterra y Camilla Parker y la decisión de ambos de no tener un hijo "para no hacerle un feo a Camilla".
Pese a los golpes del primero, el cenit del repertorio fue el segundo pasodoble dedicado a las listas de espera, donde el Yuyu apunta a su chiquillo de tres años para cuando le duela la cadera con 80. Un golpe tras otro del que, según el autor, podrían haber salido ocho o diez cuplés para competir en las siguientes fases.
Sin embargo, el gran momento de la actuación llegó antes del popurrí cuando José Guerrero Roldán apareció cargando con una puerta al hombro. Por el otro lado del escenario apareció el gran genio del humor gaditano, Antonio Reguera, que no tardó en advertir con su ya conocido "no hay olas, plato, plato. Orillera". Uno de los chistes más conocidos de Reguera. La conversación con el Yuyu se alargó varios minutos con grandes dosis de surrealismo. En la entrevista, el Yuyu explicó que no pretendía que fuera un cameo innecesario sino que quería que su vuelta al Falla fuera con sus amigos y la gente que admira.