Levantarse un día festivo e irse a desayunar a alguna venta de la Sierra de Cádiz es uno de los planazos que se organizan en muchas familias. En un día como el de Andalucía, el mollete (con su aceite, jamón y tomate para los más tradicionales) no puede faltar. Y para combinar el encanto de pasear por entornos naturales con un buen desayuno, ofrecemos una peculiar ruta por cinco de los mejores molletes de la provincia.
El Molino de Abajo, El Bosque
Se vende en diferentes pueblos de la Sierra de Cádiz como Arcos, San José del Valle, Ubrique, Prado del Rey o Benamahoma y se puede degustar de manera especial en la Venta Julián, situada muy cerca de El Molino de Abajo, un molino con más de cien años de historia que elabora molletes, de agua, al estilo tradicional de la zona.
Panadería Las Hoces, Bornos
Es uno de los despachos de pan más importantes de la Sierra de Cádiz. Cuenta con una tradición centenaria y elaboran los típicos ablandaos (el mollete de Bornos). Elaborados en un horno de leña, el sabor de este pan se mantiene en el paladar de manera exquisita.
Restaurante El Cortijo, Algodonales
Otro de los lugares de parada para desayunar de los ruteros de la Sierra de Cádiz. El mollete con jamón se acompaña del aceite de oliva virgen extra que se elabora en Algodonales. Además de dar buena cuenta del pan durante el desayuno, también hay bolsas de molletes a la venta.
Bar Cafetería Rumores, Grazalema
Con vistas a la Sierra del Endrinal, los molletes de jamón ibérico serrano son espectaculares. "El color y la capa de grasa lo detalan", destaca un cliente. Suele ser un lugar de parada habitual de los moteros que hacen rutas por la zona.
Panificadora La Paz, Espera
Espera es una de las cunas del mollete y muy popular es la masa de estos panes de esta localidad gaditana. De textura muy esponjosa y con un interior relleno de miga hidratada y con un sabor de lo más jugoso, el mollete grande de esta panificadora te va a dejar casi sin ganas de comer al mediodía.