Aderezo universal, el Vinagre de Jerez además de contar con el reconocimiento de grandes chefs nacionales e internacionales, se ha convertido en un producto cada vez más valorado por los consumidores españoles. Así lo confirma el último estudio del Consejo Regulador de Vinos y Vinagre de Jerez.
El origen del vinagre de Jerez es esencialmente el que determina su extraordinaria calidad y lo convierte en único en el mundo. Se produce exclusivamente a partir de los vinos del Marco de Jerez y solo puede elaborarse en esa región. Se envejece mediante el sistema de criaderas y solera en barricas de madera que, en ocasiones, llega a superar los 10 o 20 años, logrando así la alta concentración aromática que lo caracteriza. Fue la primera Denominación de Origen concedida en España para este tipo de producto.
Existen cinco tipos de vinagre de Jerez, cada uno con su propia personalidad y diferentes matices: vinagre de Jerez, vinagre de Jerez Reserva, vinagre de Jerez Gran Reserva, vinagre de Jerez al moscatel y vinagre de Jerez al pedro ximénez.
Según el mismo, el 42% de los españoles elige el vinagre de Jerez por su calidad, y casi el mismo porcentaje (41%), lo hace principalmente por su sabor. Con respecto a sus posibilidades culinarias, la elaboración de salsas es considerado, por el 47% de los encuestados, como el uso más adecuado para el vinagre de Jerez, y la mayoría lo vincula a recetas de carne por encima de las de pescado. Asimismo, casi un 10% lo emplea para postres.