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El terrible caso de acoso a una actriz tras participar en un programa de Telecinco: "Quería desaparecer para siempre"

Beatriz Rico explica que una foto publicada por el programa 'De viernes', que luego fue retirada, generó comentarios muy feos que la han afectado

La actriz Beatriz Rico, con las dos imágenes que han recibido odio sobre su físico.
La actriz Beatriz Rico, con las dos imágenes que han recibido odio sobre su físico.
09 de abril de 2025 a las 08:59h

La actriz Beatriz Rico ha compartido la terrible experiencia que sufrió en Instagram debido a los comentarios de decenas de personas sobre su físico. "Quiero que observéis estas dos fotos: las dos pertenecen al programa donde estuve hace un par de semanas. La de la izquierda es un pantallazo de la entrevista; la de la derecha es de unos minutos antes de entrar en plató", introduce.

"El chico de redes me hizo un par de preguntas con el móvil y yo respondí. No sé qué ha pasado, supongo que será cosa de la cámara del móvil o de la luz que teníamos, que mientras en el post de la entrevista (foto 1) la gente comenta para bien o mal mi entrevista, el post que se subió con la entrevista para redes (foto izda) tenía cerca de 300 comentarios acerca de mi físico, todos humillantes, burlones y horribles".

En un hilo en Twitter, señala que incluso "hubo una persona que escribió “dejad de lapidarla, es inhumano lo que estáis haciendo”. El post ya lo han retirado, se lo pedí al programa y lo quitaron rápidamente".

"Un festival de quién decía la barbaridad más grande"

Pero "empecé a leer los comentarios, a cada cual más cruel, y de repente me vi metida en un infierno del que no podía salir, porque ese infierno ya estaba en mi cabeza. Todos se preguntaban escandalizados cómo podía estar tan “estropeada”, “demacrada”, “envejecida” y “destrozada”. Muchos le echaban tranquilamente la culpa a las “fiestas y las drogas” (😳, yo, que soy abstemia total desde hace más de 15 años y solo salgo de casa para ir al gimnasio, al cine, a la compra, al médico o a trabajar)".

Aquello "era un festival de quién decía la barbaridad más grande sobre mí, sin conocerme de nada pero asegurando conocer el porqué de mi “destrucción física”, algo que sigo sin entender porque, aunque es cierto que se me ve algo delgada, me veo bien".

"Y porque de la otra foto (tomada media hora después) nadie comentó nada. Una mujer, hasta llegó a decir que se me notaba en los ojos un desequilibrio mental y que no deberían emitirlo en horario que lo pudieran ver menores. Os lo juro. Yo no daba crédito. Miraba y remiraba el vídeo mil veces, y no vi nada extraño en él".

La tónica del odio en redes es decir una "salvajada, llega gente a aplaudir y reír la gracia y entonces la cosa va a más: a ver quién es más bruto y dice algo más gracioso. Todo por mi físico. Mi cara, mis ojos".

"La del “desequilibrio mental” llegó a preguntarme “cómo no te da vergüenza aparecer después de irte de Supervivientes?”, muy enfadada. Yo le contesté que no me daba ninguna vergüenza irme de un juego, porque al fin y al cabo es un concurso de tv; que vergonzoso es matar, robar dinero público o agredir verbalmente como ella hacía. No lo entendió. Y siguió “matándome” fuera de sí".

"No hago daño a nadie"

Por esas fotos "esa gente vio en mi cara todo un pasado y presente de destrucción, malos hábitos, vejez destructora y aniquilación total. Os juro que no exagero. Sin conocerme, solo con mirar mi cara. Decían que se notaba que estoy "desequilibrada", a pesar de que la entrevista era tipo test, solo duró unos segundos y la contesté de la manera más normal mientras me terminaba un sándwich".

Una reflexión final: "No hago daño a nadie, no me meto con nadie, no soy polémica. No entiendo el aquelarre que se montó conmigo en medio, sin motivo. No tengo problemas de salud mental, pero podría a tenerlos si esto se repitiera con frecuencia, claro. No me vale el "¿qué te importan? Pasa de ellos, son mala gente", porque leer 300 comentarios destructivos, uno tras otro, te aseguro que hace mella en el más fuerte".

En esa dinámica, "juzgan y afirman barbaridades sin saber nada, pero ahí lo dejan tranquilamente, no sé si sin saber el daño que hacen, por participar del aquelarre o por hacer daño con saña, pero participan. Ayer, simplemente, os juro que lo único que quería era desaparecer para siempre".

Sobre el autor

Juan Antonio Carrasco

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