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El 18 de diciembre del año pasado, mientras estaba grabando una entrevista para el programa La Revuelta junto a David Broncano, el cantante Raphael comenzó a sentirse mal y tuvo que ser ingresado. Las primeras informaciones apuntaron a un accidente cerebrovascular que, tras las pruebas médicas a las que fue sometido el artista, arrojaron una realidad que hablaba de un linfoma cerebral primario.
Nada más conocerse su enfermedad, su agencia de representación canceló los conciertos programados para este 2025 en América, dejando en el aire los conciertos de la gira española.
Tras diez días ingresado, el artista de Linares salió del hospital para iniciar la recuperación en su hogar. El 30 de diciembre comenzó su tratamiento contra el linfoma. Según ha detallado Informalia, haciendo referencia a fuentes familiares, uno de los dos nódulos cerebrales alojados en el hemisferio izquierdo, causantes de sus síntomas neurológicos, podrían haber desaparecido por completo, quedando solo una parte del otro.
Sobre el estado de salud y su posible regreso a los escenarios se ha especulado estos últimos días. Su hijo, Manuel Martos, ha querido cerrar cualquier tipo de rumor ofreciendo las últimas novedades sobre el estado de uno de los grandes artistas de España.
"Todo va bien. Lo único que podemos decir es que todo va muy bien, que es lo más importante y lo único importante", ha indicado el hijo del artista a Europa Press. Tras ser preguntado por el posible regreso a los escenarios de su padre, Martos ha contestado que "de lo demás, no podemos decir nada".
Raphael se encuentra muy mejorado y con energía. Su deseo es el de volver a cantar, pero por ahora está centrado en su recuperación y no se plantea, a corto plazo, una vuelta a los escenarios.
