La Posada del Té, situada en Vejer de la Frontera, es uno de esos lugares que tienen un encanto especial por su filosofía. Un sitio acogedor en el que desconectar de la rutina y disfrutar de una experiencia gastroartística.
Un espacio que organiza monográficos de cocina vegetal creativa e intuitiva, ceremonias de té y sesiones de meditación, poesía, arte y escritura. Este mes de marzo, este rincón tan sensorial está de aniversario al cumplir su primer año de vida.
Unos postres y recetas muy coloridos dan vida a las diferentes sesiones, a las que hay que apuntarse previamente, que organiza La Posada del Té. También varias empresas han concertado citas para estrechar vínculos y aumentar el clima de bienestar y productividad.
Todos los miércoles, de 18 a 20 horas, el encuentro es con el té, la meditación y la escritura. "Es, probablemente, la actividad en la que pongo más alma, se une todo aquello que me inspira, me calma y me ayuda a ser mi mejor versión, el té como herramienta de conexión y expansión, la meditación como camino y la escritura como canal. Cuánto nos cuesta a veces parar, simplemente, dejar ser… y que placer poder hacerlo con personas que venís a confiar y a relajaros, están siendo encuentros mágicos y muy reveladores", comenta la dueña de esta posada tan especial.