El Hospital de Jerez es un centro sanitario de referencia en la provincia de Cádiz que atiende a miles de pacientes cada año. Sin embargo, en los últimos meses, ha cobrado notoriedad por varios fenómenos paranormales que se han manifestado; sobre todo; en su Unidad de Cuidados Intensivos. En esta ocasión hablaremos de la presencia de dos energías que se aparecen junto a las camas de los enfermos más graves.
Según los testimonios de algunos pacientes que han sobrevivido a su estancia en la UCI, los fantasmas son dos hombres vestidos con trajes antiguos negros, uno de ellos con un reloj de bolsillo y el otro con un sombrero de copa. Se ponen a susurrar entre ellos mirando al paciente, y según parece, su aparición tiene un efecto decisivo sobre el destino del enfermo. Si el paciente parece que va a morir, se recupera milagrosamente. Pero si el paciente parece que se va a recuperar, se muere inesperadamente.
Los profesionales de la UCI saben de la existencia de estos fantasmas, pero no han podido hacer nada para evitarlos o explicarlos. Algunos los consideran ángeles de la guarda, que intervienen para salvar a los que están al borde de la muerte. Otros los ven como demonios, que se llevan a los que tienen esperanza de vida. Lo cierto es que nadie sabe quiénes son, de dónde vienen, qué quieren o qué criterio siguen para actuar.
Tuve el placer de conocer dicha historia porque una profesional del hospital me comentó que llevaban una macabra cuenta. Los pacientes que podían articular palabra mientras estaban en la UCI; o cuando salían de ella; les narraba lo que sucedía. Para el asombro de los trabajadores siempre pasaba lo mismo; el que estaba mal se recuperaba y el que estaba bien fallecía.
La cuestión de los fantasmas de la UCI plantea un dilema ético y moral, que afecta tanto a los pacientes como a los médicos. ¿Es lícito aceptar la intervención de unos seres sobrenaturales que alteran el curso natural de la vida y la muerte? ¿Es justo que unos vivan y otros mueran por la voluntad de unos espectros que nadie conoce? ¿Es posible confiar en la ciencia y la medicina cuando hay unos factores inexplicables que las contradicen?
Estas son algunas de las preguntas que se hacen los implicados en este caso, que no tiene precedentes ni parangón en la historia de la medicina. Los dos misteriosos hombres de la UCI son un enigma que desafía la razón y la lógica, y que pone a prueba la fe y la esperanza de los que sufren y los que curan.
¿Qué opinas tú? ¿Crees que los fantasmas de la UCI son ángeles o demonios? ¿Te gustaría encontrarte con ellos si estuvieras en la UCI? ¿Qué harías si los vieras?